Detenidos dos hombres por golpear y secuestrar a una persona durante 12 horas en Alicante

Dos delincuentes habituales con base en la ciudad de Jávea (Alicante), viejos conocidos de la Guardia Civil del municipio alicantino, decidieron el pasado mes de julio subir un peldaño en su carrera delictiva. Expertos en el robo con violencia e intimidación en viviendas, se unieron para raptar durante doce horas a un hombre de 61 años, propinarle una paliza hasta que les confesó dónde guardaba 16.000 euros y abandonarlo después de hacerse con el botín. Cuatro meses después, los dos individuos, de 24 y 41 años, están detenidos como presuntos autores de un delito de secuestro, dos robos con violencia e intimidación y otro delito de lesiones graves.

Los dos arrestados, que nunca habían “trabajado juntos” con anterioridad, conocían a la víctima de su primer secuestro, según desvelan a este periódico fuentes próximas a la investigación, que ha corrido a cargo del Equipo de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Jávea. Una vez amenazado y raptado, llevaron a la víctima a un caserío de una urbanización situada entre las afueras, en dirección hacia la vecina ciudad de Dénia, en el que habían habilitado una especie de zulo. Una vez allí, pasaron unas doce horas “presionándolo para que desvelara” dónde ocultaba 16.000 euros, cantidad cuyo origen no han podido precisar las fuentes consultadas.

No les resultó fácil. Según la Guardia Civil, los dos secuestradores “golpearon a este hombre incesantemente” para sacarle la confesión. El parte de lesiones refiere numerosas contusiones y hematomas de consideración grave por todo el cuerpo. También le fracturaron el peroné de la pierna izquierda. Y llegaron incluso a quemarle con una plancha encendida. Finalmente, la tortura infligida logró su objetivo.

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Los dos secuestradores condujeron hasta la vivienda de la víctima, donde encontraron el botín que perseguían. Posteriormente, abandonaron al hombre en las inmediaciones de su casa y se marcharon en el vehículo que también le sustrajeron. Entre fuertes dolores, el secuestrado consigue dar con un amigo, quien le traslada al hospital Marina Salud de Dénia. Una vez allí, recibe la pertinente asistencia médica y decide formalizar la denuncia.

Los agentes de la Guardia Civil establecen un dispositivo de búsqueda. “Pese a que la víctima no aporta demasiados datos”, señalan las fuentes consultadas, “sí marca una urbanización, en una zona situada entre Jávea y Dénia”. En los alrededores de la finca donde sucedieron los hechos, semiabandonada, la Guardia Civil establece varios puntos de vigilancia que, finalmente, consiguen su objetivo. El mayor de los dos delincuentes vuelve al lugar del crimen. Y es detenido por los agentes que esperaban su regreso.

Los agentes del Instituto Armado descubren que el caserío es también el punto de almacenaje de los materiales sustraídos en los diferentes robos con violencia practicados por el arrestado, así como por su compañero, “generalmente en Jávea, pero también en otros puntos de la provincia e incluso de la provincia de Valencia”. En la vivienda hallan “tres ordenadores valorados en 23.000 euros, un vehículo, 700 euros en metálico, dos televisiones tasadas en 800 euros y una videoconsola valorada en 300”, desgrana la Guardia Civil.

Uno de los autores del secuestro ya está a buen recaudo. Falta el segundo, “el más joven, que se siente vigilado y decide marcharse de Jávea”, comentan fuentes de la investigación. Recala en Madrid, donde sus movimientos y sus antecedentes le sitúan rápidamente como objetivo de las fuerzas policiales, que acaban por arrestarle e ingresa en la prisión de Soto del Real (Madrid) por las requisitorias judiciales correspondientes a algunos de sus delitos previos al secuestro.

Desde el penal madrileño, y por circunstancias que las fuentes consultadas no han desvelado, el preso es trasladado a la prisión de Alicante II (situada en el municipio de Villena) donde recibió la visita de los agentes de la Guardia Civil javiense, que le informaron de que se le imputaban los mismos delitos que a su compinche. La autoridad judicial ha decretado el ingreso en prisión de los dos arrestados como presuntos autores de los delitos de secuestro, lesiones graves y robo con violencia e intimidación.