La estrategia de defensa de una narcoabogada en el banquillo
“Siempre rechacé el narcotráfico”, dice Tania Varela, la exprófuga más buscada durante cinco años por Europol
Un año después de que los Mossos d’Esquadra descubrieran el escondite de la narcoabogada gallega Tania Varela en Sitges (Barcelona) con una identidad falsa, la que fuera la prófuga más buscada por Europol desde su condena en 2011 por dos alijos de cocaína ha vuelto a Galicia este jueves para ser juzgada por blanqueo en la Audiencia de Pontevedra, donde ha negado cualquier relación con el narcotráfico.
Varela, de 44 años, trató de taparse la cara con la capucha de su plumífero evitando a los fotógrafos y compareció brevemente ante el tribunal al rechazar someterse al interrogatorio del fiscal. Solo quiso responder a las preguntas de su abogado para negar que estuviera vinculada al tráfico de cocaína y desvelar que su relación sentimental con el narco David Pérez Lago (hijastro de Laureano Oubiña), testigo en este caso, fue “una estrategia de defensa" en el juicio en el que ambos fueron condenados por tráfico de drogas.
“Siempre rechacé el narcotráfico y todo eso, solo me he dedicado a mi trabajo de abogada”, sentenció Tania Varela ante el tribunal. Para justificar el dinero que según la fiscalía blanqueó a través de la mercantil Promociones Rialto, la acusada dijo que sus ingresos procedían de haber trabajado para esta firma inmobiliaria y otra de moda, pero todo legal.
Era la segunda vez que esta abogada, que comenzó a ejercer su carrera en el Ayuntamiento de Cambados (Pontevedra) como directora del Centro de Información de la Mujer, se sentaba en el banquillo desde que su vida dio un giro en 2004, cuando conoció en su despacho a Pérez Lago y fue detenida junto a él dos años después.
En 6 julio de 2011, la Audiencia Nacional la condenó por formar parte de una organización, liderada por su expareja, que en apenas un mes había introducido a través de las costas gallegas dos alijos de cocaína, uno de 2.000 kilos y, días después, otro de 1.700. En esta segunda descarga, que tuvo lugar en la ría de Corme (A Coruña) en abril de 2006, Varela y Lago fueron capturados por la policía y entonces comenzó la guerra entre la pareja, que acabó en ruptura.
A ella le cayeron siete años de prisión y una multa de 318 millones de euros por tráfico de cocaína, condena que no cumplió, y optó por fugarse a raíz del asesinato en 2008 en Madrid del que entonces era su pareja, el abogado Alfonso Díaz Moñux. Tania dejó plantado al tribunal que juzgó a los sicarios que descerrajaron varios tiros contra Moñux, pese a ser la principal testigo de cargo del juicio, ya que iba de copiloto del abogado en el momento del crimen.
Durante cinco años fue la mujer más buscada por Europol al acumular tres órdenes de detención hasta que fue capturada el 27 de marzo de 2018 en Vilanova i la Geltrú, donde vivía con su hija y su nueva pareja en una urbanización. Una de estas tres órdenes de detención era de la Audiencia de Pontevedra, donde Tania Varela tenía pendiente el juicio por blanqueo.
La fiscalía solicita para ella una condena de tres años y seis meses de prisión y 220.000 euros de multa por varias operaciones con dinero procedente del narcotráfico que Tania Varela supuestamente blanqueó ocultando su nombre y el origen del dinero, entre ellas la compra de una parcela en O Grove y un coche entre 2005 y 2006.
Su abogado, Bernardino Rodríguez, ha pedido la nulidad del proceso alegando que hay defectos en la instrucción al considerar nulas las intervenciones del teléfono de la acusada y ha alegado que fueron autorizadas después de hacerse efectivas.
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