Casado y Rivera compiten por liderar el apoyo a Guaidó

La proposición no de ley del PP ha entrado en el Registro del Congreso a las 10.43 de este jueves. La de Ciudadanos, a las 12.25. Aunque los populares han tenido que corregir la suya poco después, porque habían escrito mal el apellido del autoproclamado presidente de Venezuela, Juan Guaidó. Les bailó el triptongo. Las dos iniciativas reclaman que el Parlamento inste al Gobierno a que reconozca a Juan Guaidó como el legítimo mandatario venezolano de forma interina. Hay un matiz: el partido de Albert Rivera pide además expresamente la celebración de unas "elecciones legítimas de acuerdo con el orden constitucional de Venezuela", algo que los populares no hacen explícito.

Rivera se ha concentrado esta mañana con el padre de Leopoldo López y varias decenas de opositores venezolanos frente a las escalinatas del Congreso, mientras Pablo Casado estuvo el miércoles en la manifestación de contrarios al chavismo en la Puerta del Sol de Madrid. Los dos partidos que se disputan el centro derecha presionan al Gobierno de Pedro Sánchez, a la vez que compiten por liderar el apoyo a la oposición venezolana a Maduro.

Venezuela es uno de los temas populares desde hace tiempo en la política española. El Gobierno de Nicolás Maduro divide a los partidos en un eje ideológico claro con el PSOE haciendo equilibrios entre sus socios en la izquierda: Podemos, Izquierda Unida y sus confluencias, que apoyan a Maduro; y las formaciones que compiten por el espacio de centro derecha, PP y Ciudadanos, que han respaldado sin ambages siempre a la oposición venezolana. El Congreso de los Diputados se ha polarizado en numerosas ocasiones en el debate sobre Venezuela, con iniciativas que sobre todo ha presentado el PP, para incomodidad de Podemos. El líder, Pablo Iglesias, ha calificado hoy el movimiento de Guaidó como un "golpe de Estado".

Tras la autoproclamación de Guaidó como presidente del país, PP y Ciudadanos no han tardado en desplegar una ofensiva para que el Gobierno español lidere su reconocimiento. Primero quieren forzar un debate en el Congreso de los Diputados para mandatar al Ejecutivo a reconocer a Guaidó, pero también llevarán la discusión a otras Cámaras: el PP, al Senado, donde tiene mayoría absoluta, mientras Ciudadanos presentará iniciativas similares en todos los parlamentos autonómicos y Ayuntamientos donde tiene representación. De momento, Pedro Sánchez ha telefoneado a Guaidó y le ha felicitado por su "coraje", aunque aún no ha habido un pronunciamiento expreso de España sobre su reconocimiento.

PP y Ciudadanos mantienen una posición similar de apoyo a Guaidó, pero el partido de Rivera incide a la vez en que el país tiene que celebrar elecciones. En eso está de acuerdo Rivera con el planteamiento del Gobierno de Sánchez. El PP se expresa de forma más ambigua con respecto a las elecciones, y pide propiciar en Venezuela un "proceso de transición democrática que les lleve a recuperar el respeto a los derechos humanos y a la libertad con una democracia plena", dice el texto de su iniciativa.

La crítica a Sánchez es común en ambos partidos por su tardanza en reconocer a Guaidó y por no liderar en el seno de la UE una postura común en favor del reconocimiento. "España no puede estar a la cola de este reconocimiento, no puede permanecer en silencio, por motivos históricos y políticos, sino que tiene que estar a la cabeza", ha reclamado este jueves Rivera. "Es de vergüenza nacional que Sánchez, que va a Davos para intentar eludir su responsabilidad en España, sea rehén de los podemitas financiados por la narcodictadura venezolana", ha criticado Casado.

Aunque la política exterior se considera un asunto de Estado, en España divide al Gobierno y la oposición. El acuerdo del Brexit ya fue criticado por PP y Ciudadanos, que lo consideraron una humillación. El ministro de Exteriores, Josep Borrell, telefoneó entonces a los grupos para anticiparles la posición de España. En esta ocasión, fuentes de la dirección de Ciudadanos han confirmado a EL PAÍS que el Gobierno socialista no ha contactado al partido para tratar de consensuar una posición sobre la crisis en Venezuela. 

En realidad, la posición del Ejecutivo de Pedro Sánchez y la de PP y Ciudadanos no es tan distante. Lo que ocurre es que la oposición urge al presidente a liderar en la UE el reconocimiento de Guaidó, y este prefiere esperar a hacerlo conjuntamente con los 28. "Buscar un consenso de 28 países de la UE, sabiendo que es muy difícil encontrarlo, significa poco menos que meter en la nevera una decisión que debe ser inmediata para favorecer una solución democrática en Venezuela, a través de la celebración de elecciones libres", argumenta Fernando Maura, portavoz de Ciudadanos en la Comisión de Exteriores.

Junto a Rivera, Leopoldo López Gil, padre del líder opositor Leopoldo López, ha dado esta mañana las gracias a España por su apoyo y ha enfatizado que Guaidó "no ha dado ningún golpe, ni se está autoproclamando, sino que está llenando un vacío de poder por la usurpación de Maduro". López se ha dirigido también al ministro de Exteriores: "No sé qué le pasa a veces al señor Borrell cuando dice que volvamos a un diálogo. Son unos sátrapas los que están en el Gobierno, no son gente decente y no van a celebrar unas elecciones decentes".