Cinco claves para 12 meses de un Gobierno obligado a pactar

Se cumple un año de las elecciones generales del 26 de junio de 2016. Aquellos comicios pusieron fin a la legislatura más corta de la actual democracia española, la XI, que surgió tras las elecciones de diciembre de 2015 y acabó tras seis meses de rifirrafe político.

El pasado junio, las urnas mejoraron los resultados del PP (que pasó de 123 a 137 escaños, obtuvo mayoría simple en el Congreso y absoluta en el Senado). El PSOE, Podemos y, sobre todo, Ciudadanos, perdieron representantes. Y arrancó una legislatura, la XII, a la que le costó despegar. Estos son sus hitos:

Meses de negociaciones

Las negociaciones para la investidura de Mariano Rajoy como presidente del Gobierno se iniciaron el 5 de julio. Hicieron falta dos rondas de consultas por parte del Rey, dos debates de investidura y una crisis del PSOE para que finalmente, el 29 de octubre, Rajoy ganase en segunda votación gracias al apoyo de Cs, Coalición Canaria, Foro Asturias y Unión del Pueblo Navarro, y la abstención de la mayoría de los diputados del PSOE. En total: 170 votos a favor, 111 en contra y 68 abstenciones. El resultado cerró el mayor periodo de un Gobierno en funciones de España, 315 días desde las elecciones de diciembre de 2015.

Un nuevo Gobierno no tan nuevo

A principios de noviembre de 2016, tras jurar el cargo en La Zarzuela, Mariano Rajoy presentó su nuevo Gabinete, con caras nuevas pero un marcado continuismo. El presidente retiró a los tres ministros más veteranos, Jorge Fernández Díaz (66 años), José Manuel García Margallo (72) y Pedro Morenés (68), e incorporó a seis nuevos titulares (que rebajaron en tres años la media de edad de su gabinete). También trató de contentar a los ministros más fuertes: la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría (perdió la portavocía del Ejecutivo en favor del titular de Cultura, Íñigo Méndez de Vigo, pero se convirtió de facto en la ministra para Cataluña) y el responsable de Economía, Luis de Guindos (que ganó Industria). Hacia Dolores de Cospedal tuvo el gesto de ponerla al frente de un Ministerio de Estado (Defensa) y mantenerla en la secretaría general del PP.

Aprobación de los Presupuestos Generales

El ministro de Economía, Cristóbal Montoro, presentó el 4 de abril el proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2017, unas cuentas para "impulsar la creación de empleo, fortalecer la cohesión social y reforzar el crecimiento económico y la competitividad de la economía española", en palabras del propio Montoro. El presupuesto consolidado del Estado y los organismos autónomos (Seguridad Social) asciende a 318.443 millones de euros, lo que supone un incremento del 1,3% respecto al año anterior. Aquí se pueden consultar sus distintas partidas. El Gobierno de Mariano Rajoy se llevó a principios de julio una de las pocas alegrías desde que a finales de octubre inició su mandato: la aprobación de los Presupuestos en el Congreso.

La moción de censura

El pasado 14 de junio, el 76% de los diputados impidió —con su voto en contra o abstención— que Pablo Iglesias fuese presidente del Gobierno. Aunque la mayoría de los grupos son críticos con Mariano Rajoy, solo Podemos y sus confluencias y Compromís, ERC y Bildu apoyaron la moción de censura de Iglesias. Se abstuvieron PSOE, PNV y PDeCAT, y el PP solo tuvo el respaldo expreso de Ciudadanos y Coalición Canaria, sus aliados desde la investidura. Dos días de debate sirvieron para constatar que no hay mayoría alternativa. Y también para que Podemos suavice la relación con el PSOE, y se mostrase la división sobre Cataluña. Aquí, un resumen en viñetas de la moción de censura.

La democratización de RTVE

El 22 de junio, el pleno del Congreso aprobó la reforma de RTVE para que la dirección de la radiotelevisión pública tenga que ser elegida por consenso en el Parlamento en tres meses. La renovación se hará por concurso público si da tiempo a ponerlo en marcha y, en todo caso, ese sistema se aplicará en futuros nombramientos de presidente y consejo de administración del ente. En la votación global final solo hubo una abstención, el resto fueron votos a favor. El origen es una proposición de ley del PSOE, sobre la que luego llegó a un acuerdo con Podemos, al que se sumó justo antes de la votación Ciudadanos. El acuerdo tiene el importante valor simbólico y político de ser la primera reforma pactada para revertir decisiones de la legislatura de la mayoría absoluta del PP.