Un sobrino de la familia asesinada en Pioz es el presunto autor del brutal crimen

El terrible hallazgo de los cuerpos descuartizados de un joven matrimonio brasileño de 30 años, y los de sus dos hijos de cuatro y un año degollados el pasado 18 de septiembre en Pioz (Guadalajara), llevaron a los investigadores a barajar la hipótesis de "un ajuste de cuentas", "de un asunto de narcos y sicarios" despiadados venidos de fuera. "Gente muy dura y profesional", decían. "Un crimen metódico", describían. Sin embargo, el desarrollo de las pesquisas ha dado un vuelco a todas esas primeras hipótesis y, contra todo pronóstico, fuentes de la investigación confirmaron ayer que se trata de "un crimen pasional" perpetrado por el sobrino del padre de esa joven familia.

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Responde al nombre de Patrick Nogueira Gouveira. Tiene 20 años. Tomó un vuelo a Brasil desde Madrid, dos días después de que se encontrasen los cadáveres de sus familiares metidos en bolsas plásticas, donde llevaban al menos un mes muertos, según los análisis forenses. Había compartido techo con su tío, Marcos Campos Nogueira; y con su tía, Janaína Santos Américo, y con sus dos hijos pequeños, antes de que estos se mudaran al chalé de Pioz donde fueron encontrados por las quejas de"un fuerte olor" denunciadas por los vecinos. Presuntamente, "era un tipo de carácter violento e inestable" que estaba obsesionado con Janaína, su tía política.

En busca y captura

El 22 de septiembre el juez del juzgado número 1 de Guadalajara dictó una orden internacional de detención, poniendo al joven en busca y captura. Sin embargo, aún no ha sido detenido. Los investigadores —un equipo formado por agentes de la Comandancia de Guadalajara y de la Unidad Central Operativa (UCO)— están encontrando grandes dificultades de colaboración con las autoridades brasileñas. Por ese motivo, este martes se levantaba parcialmente el secreto de sumario y se terminaban de confirmar las identidades de los dos adultos asesinados tras el análisis dactilar. Las dos víctimas menores están aún en proceso total de identificación.

Patrick se marchó precipitadamente a Brasil 48 horas después de que aparecieran sin vida los cuerpos de las víctimas. Para ello, el día 19 de septiembre (24 horas después del descubrimiento de los cuerpos), adelantó al un billete que tenía comprado para el día 16 de noviembre, haciendo así efectiva su huida el día 20 del pasado mes.

Según fuentes de la investigación hay "numerosos indicios razonables que los investigadores han ido obteniendo a lo largo de estos días, así como en pruebas concluyentes e indubitadas que se tienen contra el presunto autor". El hermano de Marcos, Walfran Campos, llegó a España desde Joao Pessoa (capital del estado brasileño de Paraiba) hace una semana y desde entonces ha estado trabajando codo con codo con los investigadores con el objeto de resolver el crimen.

Pese a haberlos buscado, la Guardia Civil no ha encontrado ningún dato que vincule a la familia asesinada con el crimen organizado, o del que se desprenda que la autoría pudiera corresponder a sicarios o profesionales del crimen. De las pesquisas de la investigación, sí que se ha podido determinar sin embargo que Marcos, Janaina y sus dos hijos formaban una familia normal y trabajadora que intentaban desarrollar su vida en España alejados de cualquier tipo de actividad delictiva", aseguran.

Los investigadores siguen ahora a la espera de que las autoridades brasileñas detengan al presunto autor de uno de los crímenes más cruentos que se recuerdan en España.

Por su parte, Walfran Campos, continua intentando reunir los 25.000 euros necesarios para repatriar los cuerpos de sus familiares.