Un concejal de Rita Barberá lleva un año sin pagar a sus trabajadores

Un concejal de la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, lleva un año sin pagar a sus trabajadores. Juan Vicente Jurado tiene un negocio pirotécnico con el que en los últimos años ha contratado espectáculos con numerosas Administraciones en toda España, especialmente del PP. Cuatro trabajadores, incluido su excontable, lo han denunciado por los atrasos y por valerse supuestamente de una estructura societaria para evitar pagar las deudas. El concejal guarda silencio.

Según las denuncias que constan en los juzgados de lo Social de Valencia, Jurado dejó de pagar el salario de sus trabajadores y las cuotas a la Seguridad Social en abril de 2014. Entre los afectados figura el hombre que ha llevado las cuentas de sus negocios desde 1992. En su denuncia, este detalla la estructura societaria con la que Jurado estaría presuntamente intentando ahorrarse los sueldos atrasados y la indemnización por los despidos que les comunicó a principio de mes por carta.

Fuentes consultadas por EL PAÍS aseguran, además, haber visto recientemente al concejal subiendo en un coche, un Mercedes negro, junto a Ángel de Cabo, que estuvo en prisión provisional por haber participado presuntamente en el vaciado patrimonial de una empresa del expresidente de la patronal española CEOE Gerardo Díaz Ferrán. Este periódico ha intentado sin éxito recabar la versión de Jurado a través del servicio de prensa del Ayuntamiento de Valencia. De Cabo asegura no tener relación empresarial ni profesional alguna con el concejal, a quien conoce desde hace años porque su suegro trabajó en el Consistorio. De Cabo afirma desconocer la actividad empresarial y la estructura societaria del edil.

Jurado es uno de los históricos concejales de Rita Barberá, aunque su origen no está en el PP, sino en Unión Valenciana. El partido regionalista que hizo bandera del anticatalanismo y cuyo apoyo permitió a la regidora alcanzar la alcaldía en 1991 pese a haber quedado en segunda posición, por detrás de los socialistas. Jurado se integró más tarde en el Partido Popular.

Su trayectoria se ha visto salpicada por acusaciones nunca probadas de irregularidades en su gestión como cargo público. Y por polémicas en torno a sus negocios. Hace dos años, por ejemplo, fue desahuciado de un local comercial después de que el dueño denunciara que también llevaba más de 12 mese sin pagar el alquiler. Barberá ha prescindido de Jurado para las elecciones del 24-M con el argumento de que necesitaba "caras nuevas".

La postura del concejal solo permitiría cobrar a los trabajadores parte de la deuda a través del Fondo de Garantía Salarial

El concejal ha basado los despidos de sus negocios en "pérdidas económicas", lo que le permitiría eludir el pago de las deudas. Los trabajadores consideran falsa la alegación que, de aceptarse, solo les permitiría cobrar una parte de lo adeudado a través del Fondo de Garantía Salarial.

Según los empleados, Jurado utiliza en su negocio tres empresas conectadas a través de participaciones accionariales recogidas en el Registro Mercantil. La primera sociedad, llamada Garuda SA, concentra los trabajadores y las deudas, fabrica material pirotécnico y dispara castillos de fuegos artificiales y mascletaes en distintos lugares de España. La segunda empresa, Pirotecnia Arnal SA, no tiene trabajadores ni deudas y es la que contrata con las Administraciones (algo que no podría hacer si tuviera deudas con organismos públicos como le sucede a Garuda).

La tercera sociedad, Representaciones Valencianas SA, funciona según los trabajadores como una "mercantil patrimonial": "Tiene todos los bienes (...) carece de trabajadores y no realiza actividad industrial alguna, siendo la propietaria de los inmuebles donde las otras dos mercantiles desarrollan su actividad y de la vivienda donde reside Juan Vicente Jurado".