Al menos diez incendios siguen activos en cinco Comunidades

Este lunes, al menos diez incendios forestales siguen activos aunque controlados en las Comunidades Autónomas de Castilla y León, Canarias, Comunidad Valenciana y Galicia. El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente ha enviado numerosos medios aéreos y terrestres para sofocar las llamas, especialmente en el de Cualedro, (Orense), que se inició el pasado 24 de agosto y ha quemado 2.200 hectáreas. Este siniestro ha afectado a las parroquias de Vilela y A Xironada y es el más grande que se ha declarado en Galicia en lo que va de año, pero ya está estabilizado y sin llamas. En los trabajos de control han trabajado dos técnicos, ocho agentes forestales, 29 brigadas, 11 motobombas, cinco palas, ocho helicópteros y diez aviones.

El fuego ha arrasado este verano 26.785 hectáreas de superficie forestal desde el 1 de enero de 2013 y hasta el 18 de agosto, lo que supone la cifra más baja registrada en comparación con la media de los últimos diez años en el mismo periodo, que suma 94.513 hectáreas, es decir, tres veces menos. Además, es seis veces menor que el área que se vio afectada durante estos ocho meses del año pasado cuando quedaron arrasadas 166.295 hectáreas, según ha informado el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente.

Además, los ocho grandes incendios registrados en este periodo —que no contabilizan los últimos episodios de Orense y Zamora—, contrastan con los 30 del mismo periodo en la campaña de incendios pasada. Respecto al ámbito geográfico afectado por los siniestros, el 44 por ciento se dieron en el noroeste peninsular, el 33 por ciento en las comunidades autónomas del interior de la Península, el 22 por ciento en la vertiente mediterránea y el 2 por ciento en las Islas Canarias.

El de Cualedro no ha sido el único fuego que se ha producido en Galicia el fin de semana. En la mañana de este lunes aún quedan por extinguir otros tres siniestros. También aquí se encuentran cinco aviones que luchan contra el fuego declarado en la localidad orensana de Xinzo de Limia, que ha quemado 20 hectáreas, y hay un tercero activo que ha quemado 60 hectáreas en la parroquia de Vilar de Cerreda en Nogueira de Ramuín. El cuarto incendio del que ha informado Medio Rural se ha producido el domingo por la noche en San Paio de Senra, en el ayuntamiento pontevedrés de Rodeiro., y está controlado desde las 7.50 horas de este lunes.

El 44% de los fuegos se han dado en el noroeste peninsular, y el 33% en Comunidades del interior de la Península

Por otra parte, el fuego que sufre la localidad de Santibáñez el Alto (Cáceres) está estabilizado aunque no controlado. Las llamas han quemado unas 212 hectáreas de pasto, matorral y robles, y han hecho que los vecinos estén "muy desanimados, de luto", según el alcalde de la localidad.

En una nota, responsables del Gobierno extremeño han señalado que a última hora de la tarde del domingo se desactivó el nivel 1 de alerta, pero que en el lugar permanecen efectivos de extinción de incendios como dos retenes, un camión y un agente forestal para acometer labores de refresco, control y vigilancia.

En Castellón, el incendio declarado este domingo en Vilafamés se dio por controlado a las siete de la tarde de ese mismo día tras afectar a 1,5 hectáreas de pino y matorral, según informó el Centro de Coordinación de Emergencias (CCE). El 112 recibió una llamada que alertaba del fuego a las 16.26 horas y se movilizó hasta el lugar del incendio a cuatro medios aéreos, tres brigadas de emergencia y bomberos. Además de los incendios forestales de Benicarló, que afectó a unas 15 hectáreas de matorral, y este de Vilafamés, ayer domingo se produjo un conato en L'Alcudia que afectó a 0,15 hectárea de cañar y otro en La Yesa que calcinó 0,004 hectárea de matorral.

En Castilla y León se trabaja en la extinción de otros tres siniestros en La Adrada (Ávila), Villablino (León) y Figueruela de Arriba (Zamora), que todavía se encuentran activos, y en Tenerife también hay otro al que el ministerio ha enviado un helicóptero para sofocar las llamas.