Castilla-La Mancha no descarta pedir ayuda, aunque no de “manera urgente”

Los mensajes son cada vez más insistentes, aunque nadie quiere admitir que se trate de un rescate ni avanzar cuándo se pedirá formalmente. Los analistas apuntan a que Castilla-La Mancha será una de las próximas comunidades en acudir al Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) y, desde el Gobierno regional, admiten que no descartan hacerlo, aunque no "de manera urgente".

Si la semana pasada el consejero de Hacienda, Arturo Romaní, fue uno de los más claros sobre su adhesión al fondo estatal al destacar su "preocupación por la tesorería de la comunidad”, esta mañana ha sido Vicente Tirado, secretario regional del PP y secretario de Política Electoral del PP nacional, quien ha señalado que Castilla-La Mancha no descarta "tener que acudir a todo lo que sea inyectar liquidez" a las arcas autonómicas, aunque ha aclarado que eso es algo que "ahora, de manera urgente, no lo necesitamos".

"En cualquier momento, si fuese necesario podemos acudir a los mecanismos de liquidez que tenga el mercado y si lo da el Estado, bienvenido sea", ha manifestado Tirado en una entrevista en Castilla-La Mancha Televisión.

Tirado ha asegurado que Castilla-La Mancha ha pasado de ser la comunidad con mayor déficit, un 7,5%, "a la que ni siquiera el Gobierno del PSOE le permitió endeudarse, a ser la que mejor ha hecho los deberes". En cualquier caso, en el Gobierno sigue la preocupación por el agujero autonómico, en el punto de mira de Bruselas. Las comunidades no logran, de momento, contener el déficit y en ese sentido el Ejecutivo cree que, después de la Comunidad Valencia, Cataluña y Murcia, más autonomías se acogerán a este mecanismo de liquidez.

Hacienda rechaza calificar esta ayuda como rescate, al no exigir nuevas condiciones. No obstante, el decreto que regula el instrumento financiero estatal incluye condiciones presupuestarias y de información. La norma prevé que las comunidades que se acojan al fondo deberán presentar planes de ajuste, y si ya los tuvieran, actualizarlos. Además, deberán someterse a estrictos exámenes periódicos para evaluar el grado de cumplimiento de los ajustes. También se les obligará a elaborar un plan de tesorería para evitar colapsos de liquidez en el futuro. En definitiva, el mecanismo estatal está configurado de forma similar al fondo que utiliza Bruselas para rescatar países.

Responsables de Hacienda consideran que el Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) contará con suficientes fondos para atender las necesidades de tesorería de todas las comunidades. El Gobierno pretende inyectar hasta 18.000 millones de euros en el fondo, 6.000 de los cuales serán aportados por la entidad pública Loterías y Apuestas del Estado.

Pese a que, hasta hace unas semanas, numerosas comunidades pedían al Gobierno con insistencia que pusiera en marcha este mecanismo de liquidez, ahora son pocas las que admiten que se acogerán al mismo. Muchos esperan a ver el alcance de las condiciones fiscales para decidir si se suman. Además, temen que al configurarse como un rescate dañe su credibilidad en los mercados y eleve su coste político.