El PP ocupa todo el espacio en RTVE

No hubo discusión ni dudas, al menos en el órgano reducido de poder del PSOE. Alfredo Pérez Rubalcaba preguntó a los miembros de la Comisión Permanente de la Ejecutiva Federal -formada por quienes tienen un área de responsabilidad- su parecer sobre no participar “en la farsa” de proponer miembros para el Consejo de Administración de RTVE. Visto los antecedentes, como fue la presentación de un decreto- ley, a todos les pareció razonable no hacer ninguna propuesta para “no ser cómplices” de lo que pueda pasar en RTVE, en el terreno económico-financiero y en el profesional.

Así el PSOE dejó correr el reloj y dejó su cuota vacante. Le correspondería un puesto, ya que actualmente el consejero Miguel Ángel Sacaluga tiene mandato hasta enero del próximo año. El PP aguardó hasta 20 minutos antes de que dieran las 14.00 y venciera el plazo en el registro. Antes había habido un baile de datos contradictorios, expresados incluso por escrito. A la espera de que el PSOE cambiara de opinión, desde el Grupo Popular se indicó a los servicios técnicos del Congreso que el plazo se prorrogaba hasta el mediodía del día siguiente. Hubo cierto enredo, pero el final fue claro y meridiano. Si el PSOE renunciaba a su capacidad de proponer a un consejero, el PP no dejaría la plaza vacante. “Los espacios vacíos se llenan”, señalan con ironía fuentes del Grupo Popular.

Y se llenaron. De las cinco plazas vacantes, el PP propuso a cuatro, ya que CiU antes de la una de la tarde había registrado el nombre del ingeniero y experto en administración de empresas Oscar Pierre. Los populares tuvieron alguna duda sobre si ofrecer a otro grupo parlamentario la plaza que dejaban los socialistas pero, finalmente, se la quedaron. Además del candidato a la presidencia de la Corporación, Leopoldo González-Echenique, propusieron a la periodista María Luisa Ciriza, al veterano realizador, Fernando Navarrete y a José Manuel Peñalosa, exdiputado y exsenador del PP.

“No lo teníamos previsto, pero no vamos a perder esa oportunidad”, señalan fuentes del PP al reconocer que su situación, que ya era cómoda, ahora se torna extraordinariamente confortable. Con los seis consejeros que ahora tendrán alcanzan por sí solos los dos tercios que se necesitan para algunas votaciones.

Aun así, el PSOE insiste en que no se arrepiente. Nadie les llamó para comunicarles el nombre del futuro presidente y su identidad saltó en la conferencia de prensa que ofreció el secretario de Organización, Óscar López, tras la reunión de la comisión permanente. “No le conozco”, dijo López al ser preguntado su parecer sobre González-Echenique por un periodista. “Me está usted informando de ese nombre”, remachó el secretario de Organización socialista.

“No podemos participar en un pucherazo que va a cambiar el modelo económico empresarial de la corporación y, además, el planteamiento informativo con un retorno al pasado al volver a la televisión al servicio del Gobierno”, señalan fuentes de la dirección socialista. La posible negociación se fue al traste con la presentación del decreto-ley del que el PSOE no tenía noticia y que iba a cambiar las reglas del juego para elegir al presidente de la Corporación de RTVE.

La primera impresión del PSOE apunta a que los cambios en RTVE van a ser de gran hondura, sin descartar la aplicación de la reforma laboral en la disposición transitoria que permite prescindir de empleados públicos “por insuficiencia presupuestaria sobrevenida”. Precisamente el presidente de la CSIF, Miguel Borra, entregó en el Ministerio de Hacienda una carta al ministro Cristóbal Montoro para que elimine esa disposición. La ley está ahora en el Senado.

No quieren los socialistas participar “en ese pucherazo” desde el Consejo de Administración de RTVE cuando no tienen capacidad para hacer nada, insisten. Los socialistas se reservan su labor de control de oposición para el ámbito parlamentario, en la comisión de RTVE de las Cortes Generales, Congreso y Senado, en las que el futuro presidente tiene que comparecer mensualmente.