Otegi: "La mayoría absoluta del PP puede ser una ventaja para el proceso de paz"

El dirigente de la izquierda abertzale Arnaldo Otegi ha analizado desde la cárcel en una entrevista concedida a El Correo y el Diario Vasco, a través de un cuestionario, la situación del proceso de paz y el futuro político de Euskadi tras el comunicado de cese de la lucha armada de ETA  y ante el nuevo panorama que se perfila tras la victoria del PP en las elecciones generales del 20-N.

A Otegi no cree que la mayoría absoluta del los populares pueda obstaculizar el proceso de paz, pese a que las primeras decisiones del PP con respecto al entorno de la izquierda abertzale, al negarse a recibir a Amaiur en la ronda de contactos, puedan evidenciar lo contrario. "Si hay voluntad política y talla de estadista en el presidente de España, paradójicamente la mayoría absoluta puede ser una ventaja".

El exportavoz de Batasuna prefiere deslindar al líder de los populares de su propio partido y se dirige exclusivamente a él para exigirle pasos hacia la evolución del proceso de paz. "Espero que sea lo suficientemente responsable para saber que tendrá en sus manos la posibilidad real de dar una solución definitiva al conflicto vasco".

ETA pedirá perdón a las víctimas

Entiendo que nuestros actos de solidaridad pública de la izquierda 'abertzale' con los presos pueden producir sensaciones de desasosiego en las víctimas de ETA"

Si algo destaca en la entrevista son las menciones expresas a las víctimas de ETA. La entrevista comienza con las impresiones de Otegi tras conocer que la banda había decido abandonar definitivamente la violencia. El dirigente abertzale reconoce que se acordó de "todos aquellos cargos electos, empresarios, a los que la actividad armada de ETA impedía desarrollar una vida normalizada y me alegré por ellos y sus familias".

Respecto al perdón a las víctimas, Otegi asegura que "ETA también reconocerá el dolor causado en el tiempo y términos que ella decida", para preguntarse a continuación si "reconocerá el Estado, como hizo el Gobierno británico, el dolor causado por sus diferentes estrategias". En la misma línea de reconocer el dolor causado a las víctimas de la banda, asegura que entiende que los" actos de la solidaridad pública" de la izquierda abertzale "con los presos pueden producir sensaciones de desasosiego en las víctimas de ETA".

Otegi aclara que la posición de la izquierda abertzale en el proceso de paz es irreversible y que no existe "riesgo de involución" en su seno respecto de las decisiones que se han adoptado. En el desarrollo de este proceso destaca la labor del presidente del PSE, Jesús Eguiguren, al reconocer su "honestidad en el proceso de paz".

Peor parado sale del lehendakari, Patxi López, a quien el dirigente de Batasuna hurta cualquier posibilidad de liderar ese proceso de paz por haberse "ausentado deliberadamente del país" cuando se celebró la conferencia internacional y estar a "7.000 kilómetros de distancia" cuando se produjo la declaración del cese definitivo de la lucha armada. Otegi considera que López "se ha dejado guiar por personas que han antepuesto los intereses en España de Rubalcaba a los de la paz en Euskal Herria".

El dirigente de Batasuna, en prisión desde el 13 de octubre de 2009 por el caso Bateragune, expresa la necesidad de que la estrategia penitenciaria sea abordada en el "espacio para el diálogo reservado a los Gobiernos y ETA" y aunque defiende la necesidad de la amnistía, puntualiza que lo importante es "vaciar las cárceles y el exilio", aunque no esclarece cómo.