Los 410 planes urbanísticos andaluces ya aprobados contemplan 275.000 VPO
El Plan de Vivienda Protegida y Suelo pactado entre Junta, ayuntamientos, empresarios y entidades financieras prevé la construcción de 300.000 casas a precio asequible hasta 2018
Más de ocho años después de la entrada en vigor de la Ley de Ordenación Urbanística de Andalucía (LOUA), 410 municipios ha adaptado su planeamiento a las determinaciones de esta compleja norma y, aunque en número apenas sólo representan el 53% del total de ayuntamientos de la comunidad (771), el alcance es muy considerable porque en ellos reside el 81% de la población andaluza. Estos 410 planes ya adaptados contemplan reservas de suelo para la construcción de 275.000 VPO, lo que según la consejería de Obras Públicas “posibilita cubrir la demanda de vivienda adecuada a las necesidades ciudadanas en cada municipio”. El Plan de Vivienda Protegida y Suelo pactado entre Junta, ayuntamientos, empresarios y entidades financieras prevé la construcción de 300.000 casas a precio asequible hasta 2018.
Una de las novedades que introdujo la LOUA es la obligatoriedad de destinar para VPO un 30% de los nuevos suelos urbanos que se desarrollen. En el momento en el que se elaboró la ley la construcción de viviendas protegidas era prácticamente nula. . Diversas modificaciones y normas que se han promulgado después como el Plan de Ordenación del Territorio de Andalucía (POTA), o los planes subregionales o la ley de derecho a la vivienda han ido introduciendo nuevas determinaciones y obligaciones (límites al crecimiento o protección de suelos litorales, por ejemplo), que han hecho que se ralentizara el proceso de adaptación de los planes urbanísticos, que de por sí ya suponen un complejo procedimiento, cuando le ley teóricamente concedió un plazo de cuatro años a partir de los cuales no se aceptarían modificaciones parciales a los planes no adaptados.
A comienzos de la presente legislatura apenas 80 ayuntamientos habían aprobado sus nuevos planes generales de ordenación urbana (PGOUs) adaptados a la LOUA. Para acelerar el procedimiento, la Junta habilitó mediante decreto en enero de 2008 una fórmula que permitía la adaptación parcial de los planeamientos municipales. Este atajo pretendía primordialmente disponer de suelo de VPO dada la escalada de precios del mercado libre que imposibilitaba acceder a una vivienda a numerosas bolsas de población. Y esta vía parcial ha sido de hecho la escogida por la inmensa mayoría de los municipios, 301 de los 410, el 73% en términos relativos, que no obstante no quedan exentos de elaborar un nuevo PGOU completo, pero ya sin la misma premura. Estos 301 municipios reservan suelo para 133.500 VPO. Además, otros 104 ayuntamientos tienen actualmente en tramitación la adaptación parcial de sus planeamientos. Es posible que el proceso de revisión de los planeamientos municipales sufra ahora un nuevo frenazo en los ayuntamientos que han cambiado de color tras las elecciones del 22 de mayo pues algunos de ellos ya ha advertido que examinarán lo realizado hasta ahora, cuando no el contenido de algunos planes que estaban en elaboración, casos por ejemplo de Estepona, Rincón de la Victoria o Torrox, en la Costa del Sol.
La adaptación parcial debe recoger la clasificación de la totalidad del suelo de un municipio, delimitando las superficies adscritas a cada clase (urbano, urbanizable, no urbanizable) y los sistemas generales. Pero sobre los suelos ya planeados, en ningún caso pueden calificar nuevos suelos urbanos ni urbanizables, ni alterar los parámetros de edificabilidad y densidad, ni modificar las ordenanzas de usos del suelo, que requieren la revisión completa del PGOU, por lo que la parcial puede considerarse una adaptación a cuenta por la vía rápida, ya que el procedimiento puede resolverse entre tres y cinco meses, cuando la elaboración de un plan completo exige un mínimo de cuatro años –el nuevo plan de Málaga por ejemplo que está a punto de publicarse en los boletines oficiales para que entre en vigor, recibió la aprobación inicial hace siete años-.
La vía rápida de la adaptación parcial ha sido utilizada por la mitad de los 29 municipios de más de 50.000 habitantes, que son justamente donde más complejo resulta elaborar un PGOU y también los que más necesidad tienen de VPO. Son los casos por ejemplo de Córdoba, Granada, Huelva, Jaén, Algeciras, Chiclana, El Puerto de Santamaría, La Línea, Sanlúcar de Barrameda, Linares, Mijas, Vélez Málaga, Alcalá de Guadaira o Dos Hermanas).
Apenas la cuarta parte de las grandes ciudades se han dotado de un nuevo PGOU completo (Sevilla, Jerez de la Frontera, Marbella, Fuengirola, Motril, El Ejido y Roquetas, a los que ya se puede sumar Málaga, sólo pendiente de tramitación, y de forma inminente también Cádiz y San Fernando, que tienen su planeamiento en la última fase de tramitación. En total son 109 las ciudades que ya se han dotado de un nuevo PGOU completo adaptado a la LOUA, apenas el 26,5% de los ayuntamientos.
Sevilla es con diferencia la provincia donde más se ha avanzado en la revisión de los planeamientos urbanísticos, 81 de los 410 totales; con 63 adaptaciones parciales y 18 nuevos PGOU. Normalmente, las provincias litorales y con tensiones por la construcción de viviendas en suelo no urbanizable son las más atrasadas en cuando a elaboración de nuevos planes. Así, en Almería sólo se han aprobado seis nuevos PGOU, siete en Cádiz y 11 en Málaga. Granada y Córdoba son las provincias con más planes completos revisados, 24 y 20, respectivamente. En Huelva se han concluido 13, y en Jaén, 10..
Respecto a las adaptaciones parciales, Sevilla es la provincia con más número (63), seguida de Granada (52), Huelva (36), Almería, Jaén y Málaga (35 en cada una de las tres), Cádiz (28) y Córdoba (17)
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