_
_
_
_
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

‘Bruno’

“Podrás venir a verlo cuando quieras”, me dijeron. Pero no fui, no se va nunca: no se visita lo que se abandona

‘Bruno’, el gato de Manuel Jabois, en una foto de 2005.
‘Bruno’, el gato de Manuel Jabois, en una foto de 2005.Manuel Jabois
Manuel Jabois

A Bruno, un gato apenas nacido, me lo empecé a encontrar en 2005 en la puerta de Diario de Pontevedra maullando, pobrecito, sin madre ni sustento. Después de un día con él allí, lo llevé a casa por la noche y se quedó sobre el sofá con los ojos como platos mientras yo leía en internet cómo se criaba un gato y, ya lanzado, cómo podía criarme a mí mismo. Le enseñé la casa y le di un biberón de leche. Empezó entonces a quererme de manera irremediable, y yo a él.

A los tres años nos cambiamos de casa y hubo que despedir a Bruno. No sé por qué me dejé convencer, pero al gato no se acostumbraban ni mi madre ni mi novia; supongo que hay pinzas imposibles. Hoy no me dejaría, entonces qué sé yo. También sé que ha muerto gente más importante y más querida, pero yo nunca he vuelto a llorar como ese día. Todo el camino a la finca en la que lo dejamos, y el momento de despedirme de él, dándole besos como a un futuro huérfano. Y el camino de vuelta. Y los días siguientes. “Podrás venir a verlo cuando quieras”, me dijeron. Pero no fui, no se va nunca: no se visita lo que se abandona.

Once años después, el 19 de enero de 2019, apareció un tuit: “Un saludo de Bruno”. Allí estaba él, gordo y feliz como Garfield. “Vive a cuerpo de rey en Caldas de Reis”, me dijo el chico. Y lo parecía. Mi rey Bruno, que lo recogí príncipe en la puerta de un diario en el que ya no trabajo, de una ciudad en la que ya no vivo, en una casa y con una novia que ya no tengo; ¿cuántas vidas caben en siete?

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Miro la foto hasta volver a llorar, ahora no por el gato sino por el tiempo, y recuerdo de esa íntima obra maestra sobre la familia y la pérdida de Agustín Fernández Mallo, Madre de corazón atómico, la cita de Canetti que dice que cuando miras fijamente a un animal parece que dentro hay un ser humano que se está burlando de ti. Y ese ser humano, si te asomas dentro, eres tú.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Manuel Jabois
Es de Sanxenxo (Pontevedra) y aprendió el oficio de escribir en el periodismo local gracias a Diario de Pontevedra. Ha trabajado en El Mundo y Onda Cero. Colabora a diario en la Cadena Ser. Su última novela es 'Mirafiori' (2023). En EL PAÍS firma reportajes, crónicas, entrevistas y columnas.
Tu comentario se publicará con nombre y apellido
Normas
Rellena tu nombre y apellido para comentarcompletar datos

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_