Hay que tener vergüenza

Elecciones infernales, esta columna con nombre robado a Alaska que les ha acompañado durante el último mes, llega a su fin explicando cómo reaccionan los medios cuando tienen que corregirse. Xavier Vidal-Folch publicó el martes una pieza de opinión titulada Bomba atómica de Feijóo contra Feijóo. Aseguraba que la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, había dicho a su equipo tras reunirse con Feijóo: “Este hombre ha venido sin ideas, solo a desmontar al Gobierno de su país”. Esa frase, entrecomillada, se atribuía a “fuentes de la Comisión”, pero la Comisión la desmintió “categóricamente”. La cita, como explicaba en la edición del miércoles la Defensora del Lector de EL PAÍS, necesitaba más fuentes. Si no las tenía no debió haberse publicado. La directora decidió borrar la cita de la versión en internet. En la edición de papel quedará para siempre, como mancha y como lección.

¿Qué pasa cuando te equivocas, cuando no contrastas la información adecuadamente o cuando te la inventas y te desmienten? ¿Qué debemos hacer los periodistas y qué deben hacer los medios? ¿Lo que hicieron Vidal-Folch y EL PAÍS? Se pasa vergüenza, sobre todo entre la profesión, cuando debes hacer eso. Con lo fácil que es publicar historias sobre extraterrestres, que no te pueden desmentir.

Mi último cuento lo voy a usar para contarles que se pueden hacer otras cosas. El 6 de abril de 2021, El Mundo publicó: “Bruselas abrirá una investigación al Gobierno por el caso Plus Ultra”. Era falso. Al día siguiente, un portavoz de la Comisión dijo: “La Comisión no tiene ninguna investigación abierta al respecto”. Durante meses sus portavoces repitieron lo mismo a cuantos corresponsales en Bruselas preguntaban por el caso. ¿Qué hizo El Mundo? Seguir cavando y alimentando el bulo durante meses. Sostenella y no enmendalla, cual hidalgo venido a menos.

El 14 de octubre pasado la agencia Bloomberg publicó que la Comisión Europea bloquearía los fondos europeos a España. Era un error por una incomprensión. Pero era irresistible para ser utilizado como bulo, y muchos medios españoles no se resistieron. Una portavoz de la Comisión Europea lo desmintió: “Cualquier afirmación de que la Comisión ha congelado los fondos a España en el marco del Mecanismo de Recuperación y Reactivación es infundada”. Nadie rectificó. ¿Por qué? Se pueden aventurar varias razones pero hay una evidente: inventar no tiene consecuencias, nadie te lo afea si tu vergüenza no lo hace.