Divulgadores científicos
Los lectores opinan sobre la información ante la pandemia, sobre las restricciones de movilidad, sobre Laura Borràs y sobre la crisis migratoria
Si algo hay apasionante es entender cómo diferentes descubrimientos han contribuido a vencer enfermedades, dándonos seguridad y tranquilidad. Y en una encrucijada sanitaria como la actual entenderlo habría contribuido a que la ciudadanía menos culta en este sentido apoyara las medidas que se van tomando, ya que resistirse a ellas ha facilitado y puede facilitar nuevas oleadas de enfermedad y muerte. Es importante saber cómo desapareció la viruela y cómo son evitables, y se evitan, enfermedades como el sarampión, paperas y rubeola (en una sola vacuna), la tosferina, la poliomielitis, el tifus o la fiebre amarilla, entre otras; y que se siguen buscando vacunas para enfermedades todavía muy prevalentes. Que se hubieran conocido todas estas historias habría ayudado a entender las medidas. Necesitamos más periodistas divulgadores científicos.
Eliseo Pascual Gómez. Alicante
La coherencia brilla por su ausencia
Se acerca la Semana Santa, y mientras alemanes, británicos y personas de diferentes nacionalidades planifican sus vacaciones en Baleares, Canarias y otros lugares de España, nosotros, los propios españoles, apenas podemos salir de nuestra provincia. Esta medida, cuanto menos controvertida, del Gobierno de cerrar la movilidad entre comunidades pero tener las fronteras abiertas, es especialmente llamativa cuando estos viajeros internacionales suelen proceder de países con una incidencia mucho mayor, como Francia, o con presencia de nuevas cepas, como los británicos. El Gobierno pide a los ciudadanos que cumplan las restricciones, el problema es que cuando las medidas carecen de coherencia son más difíciles de comprender y, por tanto, más difíciles de acatar. Quizá si el Gobierno hubiera aplicado algo más de sentido común en las medidas, esta pandemia hubiera tenido menos incidencia y nosotros menos restricciones cuanto menos cuestionables.
Ignacio Martos Munitiz. Tomares (Sevilla)
Cambiar las normas
Leo en EL PAÍS del 15 de marzo sobre la nueva presidenta del Parlamento de Cataluña: “Borràs quiere un nuevo reglamento para blindarse ante un eventual juicio”. Noticia que pasa sin pena ni gloria, como tantas otras, sin suscitar ninguna reacción, aparentemente, en la opinión pública. Pues bien, yo también pido respetuosamente una modificación del Código Penal que me blinde en caso de vulnerar la ley, para evitar las consecuencias penales de dicha vulneración, ya que soy un modesto ciudadano sin las prerrogativas y privilegios de que goza nuestra rutilante y lustrosa clase política.
Francisco L. García Cervantes. Cartagena (Murcia)
La muerte de una niña
Desde que me golpeó la imagen de ese bracito inerte en el suelo, no hay día en el que no haya buscado noticias sobre el estado de la pequeña que llegó moribunda a tierra canaria tras un viaje infernal por mar. Finalmente, tras estar ingresada en cuidados intensivos, la pequeña falleció el domingo. Ni siquiera sabemos cuál era su nombre. Y es que hay demasiados seres humanos condenados a sufrir como si no existieran. Esta es una realidad tan, tan cruel, que no respeta ni a niñas de dos años.
Isabel González Sicilia. Cádiz
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