La sidra es natural, refrescante y con poca graduación; se puede tomar como aperitivo, en cócteles y hay infinidad de variedades. ¿Por qué este jugo de manzana fermentado aún no lo ha petado en España?
Una visita a las sidrerías de la plaza del Fontán y de la calle de Gascona. Y en la confitería Camilo de Blas, un carbayón, pastel de yema y crema. Paseo por la capital asturiana, culta y peatonal