El pequeño Nicolás en el chiquipark del poder
No cayó en la ideología del esfuerzo que asedia a los chavales: levantarse a las cinco, matarse a ‘burpees’, trabajar más de la cuenta, romper tus límites, perseguir tus sueños. Lo suyo era la jeta
No cayó en la ideología del esfuerzo que asedia a los chavales: levantarse a las cinco, matarse a ‘burpees’, trabajar más de la cuenta, romper tus límites, perseguir tus sueños. Lo suyo era la jeta