_
_
_
_

Los demócratas blindan a Mike Johnson, presidente republicano de la Cámara de Representantes

Los líderes del grupo parlamentario aseguran que se opondrían a una moción de censura contra el ‘speaker’ presentada por sus compañeros republicanos

Mike Johnson presidente de la Cámara de Representantes
El presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, este lunes en un acto en Washington.Greg Nash / POOL (EFE)
Miguel Jiménez

Los demócratas se ofrecen para blindar al republicano Mike Johnson, presidente de la Cámara de Representantes, frente a sus propios compañeros. La aprobación de la ayuda a Ucrania por 61.000 millones de dólares (unos 57.000 millones de euros) —dentro de un paquete más amplio de 95.000 millones— provocó la ira de algunos de los miembros del ala dura del Partido Republicano. Eso hacía temer una moción de censura que pudiera destituirle, como ocurrió con su antecesor, Kevin McCarthy. El apoyo demócrata, sin embargo, permitirá que siga en su puesto.

La congresista Marjorie Taylor Greene, trumpista acérrima, llegó a plantear hace más de un mes una moción de censura contra Johnson a raíz de la aprobación de las leyes de financiación de la Administración. Por entonces, señaló la ayuda a Ucrania como la nueva línea roja para activarla. Cuando se aprobó, se mostró furiosa: “Tenemos congresistas ondeando la bandera de Ucrania en el hemiciclo de la Cámara de Representantes mientras no hacemos nada para asegurar nuestra frontera. Creo que todo el mundo en este país debería estar furioso. No están sirviendo a su país”, dijo entonces.

Varios republicanos radicales contrarios a la aprobación de más fondos para Kiev, como Thomas Massie y Paul Gosar, se declararon también partidarios de destituir al speaker, como se denomina al presidente. Aunque gran parte de los conservadores se resistía a repetir el espectáculo de caos y vacío de poder que siguió a la destitución de McCarthy, la mayoría republicana en la Cámara es tan estrecha que si los demócratas votaban en su contra, el puesto de Johnson peligraba.

Ahora, los demócratas salen al rescate del speaker, antes incluso de que se plantee una votación que queda condenada de antemano al fracaso. La paradoja es que el partido progresista blinde a un cristiano evangélico ultraconservador, activista contra el aborto, con posiciones radicales contra los derechos LGTBI, defensor de recortes de prestaciones sociales y negacionista electoral trumpista que lideró los esfuerzos jurídicos de un nutrido grupo de congresistas republicanos por anular la victoria de Joe Biden en las presidenciales de 2020.

Los líderes del grupo parlamentario demócrata han expresado su apoyo a Johnson en un comunicado en el que arremeten contra los republicanos por haber “retrasado de forma irresponsable” la ayuda finalmente aprobada a Ucrania, Israel y Taiwán, en un paquete que también incluye fondos de ayuda humanitaria a la población civil en peligro en lugares como Gaza, Haití y Sudán. La ayuda a Ucrania se aprobó con 311 votos a favor, 112 en contra y uno en blanco. Pero mientras todos los votos demócratas fueron a favor, entre los republicanos hubo 101 a favor, 112 en contra y uno en blanco.

La actuación de Johnson al trocear el paquete de ayuda y desbloquear las votaciones fue clave para que pudiera salir adelante, en lo que fue un claro triunfo político para Joe Biden. Ahora, los demócratas le devuelven el favor al speaker. “En este momento, tras la finalización de nuestro trabajo de seguridad nacional, ha llegado el momento de pasar página en este capítulo de obstrucción republicana pro-Putin. Votaremos a favor de rechazar la moción de la diputada Marjorie Taylor Greene para dejar vacante la presidencia. Si ella invoca la moción, no tendrá éxito”, han indicado en su nota tras una reunión el grupo parlamentario que lidera Hakeem Jeffries.

La respuesta de Greene

Marjorie Taylor Greene ha respondido de inmediato al comunicado demócrata. “¿A qué acuerdo secreto llegó Johnson para obtener el apoyo de los demócratas?”, ha tuiteado en un mensaje en el que afirma: “Debería dimitir, cambiar de partido y seguir votando por la invasión de fronteras abiertas de Biden en Estados Unidos, las guerras interminables, el aborto libre sin límites temporales, la agenda trans en los niños, el espionaje sin orden judicial al pueblo estadounidense, la instrumentalización del Gobierno contra el presidente Trump y sus partidarios, y todos los demás elementos de la lista de deseos demócratas que ha entregado”.

La congresista republicana parece dispuesta a seguir adelante con su moción de censura a pesar de saber que está condenada al fracaso. “Si los demócratas quieren elegirlo speaker (y algunos republicanos quieren apoyar al speaker elegido por los demócratas), les daré la oportunidad de hacerlo”, continúa en su tuit. “Los estadounidenses merecen ver al Unipartido en plena exhibición. Estoy a punto de darles su fiesta de presentación”, añade.

Muchos republicanos de la Cámara de Representantes están ansiosos por dejar atrás las divisiones que han atormentado a sus filas desde que se hicieron con la mayoría el pasado enero. En una sesión a puerta cerrada celebrada el martes por la mañana, gran parte del debate se centró en cómo crear unidad en el partido de cara a las elecciones de noviembre, en que se renuevan los 435 escaños de la Cámara para un nuevo mandato de dos años.

El representante Andy Barr, republicano de Kentucky, dijo que los republicanos escucharon a Michael Whatley, el nuevo presidente del Comité Nacional Republicano, quien hizo hincapié en que Donald Trump, el previsible candidato presidencial del Partido Republicano, quiere unificar la mayoría en la Cámara. “Lo que él quiere es una mayoría republicana unificada, así que mi mensaje es el mismo que el del presidente Trump”, dijo Barr, según recoge AP.

Para los demócratas, esa división republicana ha permitido en la práctica pactar en los momentos decisivos con el ala más moderada de los republicanos. Gracias a eso y a su mayoría en el Senado, han podido sacar adelante en el último año la suspensión del techo de deuda, la aprobación de las leyes presupuestarias y el paquete de ayuda a Ucrania, Israel y Taiwán, como medidas principales.

Siga toda la información de las elecciones en Estados Unidos en nuestra newsletter semanal.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Miguel Jiménez
Corresponsal jefe de EL PAÍS en Estados Unidos. Ha desarrollado su carrera en EL PAÍS, donde ha sido redactor jefe de Economía y Negocios, subdirector y director adjunto y en el diario económico Cinco Días, del que fue director.
Rellena tu nombre y apellido para comentarcompletar datos

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_