La policía sigue la pista a un posible asesino serial en el centro de California
Los detectives de la ciudad de Stockton, al este de San Francisco, creen que un solo sospechoso es responsable de seis homicidios cometidos desde abril de 2021
La imagen apenas dice algo. La silueta de lo que parece ser un hombre aparece en movimiento. El pie izquierdo frente al derecho, en lo que es una marcha tranquila. Los pantalones son negros. La chaqueta también. Un gorro cubre la cabeza, lo que hace aún más difícil identificar a una figura genérica. La policía de la ciudad de Stockton, al este de San Francisco, ha decretado a esta figura “persona de interés”, pues podría dar información de siete tiroteos, seis de ellos fatales, ocurridos entre abril de 2021 y el 27 de septiembre en el centro del estado de California. “Creemos que es un asesino serial en potencia. Y así es como lo vamos a tratar”, aseguró este martes el jefe de policía Stanley McFadden sobre el sospechoso autor de estos crímenes.
Las autoridades de Stockton anunciaron la semana pasada que cinco homicidios registrados entre el 8 de julio y el 27 de septiembre están relacionados entre sí. Todas las víctimas eran hombres de entre 21 y 54 años, que fueron asesinados con arma de fuego en incidentes ocurridos a altas horas de la noche o en la madrugada. Este martes, la policía añadió otro crimen a la lista del mismo sospechoso. Se trata de un asesinato cometido el 10 de abril de 2021 en Oakland, a 120 kilómetros al oeste de Stockton. Este sería el primer homicidio perpetrado por el presunto asesino serial al sur del río Calaveras, que sirve de frontera natural para la ciudad de 300.000 habitantes. Hasta este lunes, Stockton había registrado 43 asesinatos, once más que en todo 2021.
McFadden afirmó que las conclusiones de la policía están basadas en evidencias encontradas por los peritos en criminalística que han acudido a las múltiples escenas del crimen y en algunos fragmentos grabados por cámaras de seguridad. El jefe de policía, sin embargo, no dio más detalles en una conferencia de prensa ofrecida la tarde del martes, donde se reveló un vídeo de pocos segundos en el que el sospechoso camina en lo que parece un corredor de un edificio de apartamentos. La policía no ha explicado si a este sujeto se le busca en su papel de sospechoso o testigo.
Tres de las seis víctimas eran personas sin techo, ha añadido el jefe de policía. “Se trata de gente que es tomada por sorpresa”, dijo McFadden el viernes. El gran misterio que la policía trata ahora de resolver es qué pasó para que el asesino volviera a matar tras 400 días sin usar su arma. De momento, la policía ha pedido a los habitantes de Stockton viajar solos a altas horas de la noche y mantenerse en las zonas de la ciudad mejor iluminadas.
Además de la muerte del hombre de 40 años en Oakland, las autoridades sospechan que la misma pistola fue empleada en un ataque no letal contra una mujer sin techo de 46 años, vecina de Stockton. Este incidente ocurrió el 16 de abril de 2021 a las 3.20 de la madrugada. En ese entonces, la mujer escuchó que alguien estaba merodeando alrededor de su tienda de campaña y salió para ver quién era. Vio una gruesa chaqueta color negro y el rostro de una persona oculta con una mascarilla contra el coronavirus. El sujeto sacó la pistola y comenzó a disparar. La mujer salvó la vida.
“No sabemos cuál podría ser el móvil de estos homicidios”, dijo McFadden esta semana. Más allá de la coincidencia geográfica, las víctimas no tenían nada en común. Cinco de las seis víctimas eran de origen latino, pero los asesinatos se han dado en una entidad donde el 40% de la población se identifica con este grupo. Ninguna de las víctimas fue robada. Las autoridades no han vinculado tampoco estos crímenes a la violencia de las pandillas o las bandas de narcotraficantes.
La oficina del sheriff del condado de Alameda identificó como Juan Miguel Vasquez Serrano, de 40 años, como la víctima del 10 de abril de 2021 en Oakland. Algunos vecinos del barrio Seminario, al este de la ciudad, dijeron al San Francisco Chronicle que era un hombre desempleado que ganaba algunos dólares reparando vehículos en la zona. “Era un buen tipo, realmente humilde”, dijo un habitante de la zona que había acudido a sus servicios para reparar un Buick de 1973.
Las autoridades han informado que el resto de las víctimas son Paul Yaw, de 35 años; Salvador Debudey, de 43; Jonathan Hernández, de 21; Juan Cruz, de 52 y Lawrence López, de 54. Ninguno de los homicidios fue captado por las cámaras de vídeo de la ciudad. La policía local está siendo auxiliada por el FBI, la Policía de Caminos de California, oficinas del sheriff de ciudades vecinas y por la Agencia Federal de Alcohol, Tabaco y Armas. Hay una recompensa de 125.000 dólares a quien aporte información sobre el hombre que ha llevado el terror a Stockton.
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