_
_
_
_

Macron visita al Papa en plena polémica con Italia

El presidente francés no se reunirá con el primer ministro italiano, Giuseppe Conte

Daniel Verdú
Macron intercambia regalos con el papa Francisco este martes en el Vaticano.
Macron intercambia regalos con el papa Francisco este martes en el Vaticano.ALESSANDRA TARANTINO / POOL (EFE)

“Una creo que representa a la derecha fuerte, pero el otro no sé de dónde viene”. Así se refirió papa Francisco al actual presidente de Francia, Emmanuel Macron, cuando se jugaba el puesto en la segunda vuelta de las elecciones contra Marine Le Pen. Algo más de un año después, con todas las cartas ya sobre la mesa, Francisco le ha recibido en el Vaticano en un momento especialmente delicado para el mandatario francés. En plena tormenta por la reforma de la UE y las tensiones con Italia, los temas sobre la mesa  eran  la inmigración, los populismos o el futuro de Europa.

Más información
Macron busca retener a Italia entre los partidarios de la integración de la UE
Macron y Sánchez defienden “centros cerrados” para inmigrantes en Europa

La reunión duró 57 minutos y fue a puerta cerrada. Durante el tiempo que se permitió asistir a los periodistas pudo verse como Macron entregó a Francisco una antigua edición del libro Diario de un cura rural de Georges Bernanos -que el Papa dijo que había leído muchas veces-, y el pontífice le regaló el medallón que representa a San Martín de Tours, patrón de Buenos Aires y que dió su manto a los pobres. "Quiere subrayar la vocación de los gobernantes de ayuda a los pobres. Porque todos somos pobres", le recordó.

Macron no visitará al primer ministro italiano, Giuseppe Conte. Pero el presidente francés, que siempre se ha definido como agnóstico, utilizará la visita para mandar un mensaje claro al Palacio Chigi, sede del Gobierno italiano, sobre sus planes de futuro y las nuevas alianzas europeas. La tensión ha alcanzado cotas insólitas en las últimas semanas. El líder del Movimiento 5 Estrellas (M5S) y vicepresidente de Italia, Luigi di Maio, aseguró el pasado domingo que Macron es hoy el enemigo número uno de Italia. La realidad es que el nuevo Gobierno todavía no ha realizado ninguna visita oficial al Santo Padre, pese a que Matteo Salvini anunció hace unos días su intención de hacerlo y recibió la callada por respuesta.

De hecho, el líder de la Liga flotaba en el ambiente. La política migratoria que trata de imponer por el ministro del Interior, especialmente su agresiva retórica, preocupa en el Vaticano. La opinión de la Santa Sede, posicionada desde la llegada de Francisco claramente del lado de los migrantes, será crucial en la percepción que algunos ciudadanos pueden tener sobre la dinámica política del gobierno de la coalición populista.

En clave interna, Macron —que llegó acompañado por su esposa Brigitte, el ministro del Interior, Gérard Collomb, y una delegación de 15 personas— también lanza un guiño a la comunidad católica francesa, tradicionalmente escorada a la derecha. Durante esta visita, Macron recibirá el título de primer y único canónigo de honor de la basílica de Roma San Juan de Letrán, una distinción honorífica cuya tradición se remonta a derecho a los jefes de Estado franceses desde Enrique IV.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Daniel Verdú
Nació en Barcelona pero aprendió el oficio en la sección de Madrid de EL PAÍS. Pasó por Cultura y Reportajes, cubrió atentados islamistas en Francia y la catástrofe de Fukushima. Fue corresponsal siete años en Italia y el Vaticano, donde vio caer cinco gobiernos y convivir a dos papas. Corresponsal en París. Los martes firma una columna en Deportes

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_