El avance del régimen arrolla a los rebeldes en Alepo
Miles de civiles huyen de los combates en el este, que amenazan con partir en dos el frente insurgente
El avance de las fuerzas del régimen sirio en las últimas horas amenaza con dar un vuelco a la sangrienta batalla en los barrios del este de Alepo. Las tropas gubernamentales se apoderaron el sábado del distrito oriental de Hanano, controlado por los rebeldes desde 2012, y conquistaron el domingo también los barrios colindantes de Jabal Bardro y Baidin. Miles de civiles han huido del frente de combates, según confirmó el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, que cuenta con informadores sobre el terreno. La mayoría se dirige hacia al sur de la parte rebelde de Alepo, ante el temor a que la ofensiva del Ejército divida en dos mitades el área insurgente de la ciudad, aunque cerca de 10.000 personas se han pasado a la zona gubernamental o el área controlada por las milicias kurdas, informa France Presse.
Los bombardeos aéreos y de la artillería del régimen se concentran ahora sobre los distritos de Sakhur, Haidaria y Sahar. Si las fuerzas leales al presidente Bachar el Asad logran romper la resistencia en estos feudos de la oposición, el frente rebelde puede empezar a desmoronarse tras quedar seccionado. La agencia estatal de noticias SANA proclamaba los avances gubernamentales, mientras el Observatorio constataba la retirada de los rebeldes y un “éxodo de civiles sin precedentes en cuatro años en Alepo”. Fuentes del mando insurgente citadas por Reuters admitían que la información sobre la caída de Hanano por parte del Ejército era “en gran parte cierta”. Este distrito, donde los artificieros militares ya han comenzado las operaciones de desminado y desactivación de bombas trampa, tiene un alto valor simbólico, ya que fue el primero en ser tomado por los rebeldes en Alepo hace cuatro años.
El corte de las vías de suministro de armas desde Turquía, el agotamiento de las reservas de víveres y el colapso de los centros sanitarios tras los últimos ataques han forzado el repliegue rebelde ante el imparable avance del régimen. Desde que se inició la operación del Ejército, el pasado día 15, han muerto 219 civiles en los ataques, según el recuento del Observatorio. Más de 250.000 personas permanecen cercadas en el este de Alepo desde el mes de julio, cuando Naciones Unidas pudo hacer llegar los últimos convoyes con ayuda humanitaria.
La ofensiva general terrestre de las fuerzas de El Asad –apoyadas por combatientes aliados chiíes de Irán, Líbano e Irak– se produce tras la victoria electoral en Estados Unidos del republicano Donald Trump, partidario de dejar de apoyar a la oposición y de concentrar el esfuerzo bélico en Siria en la lucha contra el Estado Islámico. Rusia, que apoya militarmente al régimen desde hace un año, asegura que su aviación no está interviniendo en Alepo y que solo dirige sus ataques contra milicias yihadistas rebeldes en las cercanas provincias de Idlib y Homs.
Ataque de Israel al ISIS en el Golán
En pleno periodo de transición de poder en la Casa Blanca, se registraba también ayer el primer ataque israelí de entidad contra combatientes del Estado Islámico en las proximidades de los Altos del Golán, territorio sirio ocupado por Israel desde 1967. El portavoz de las Fuerzas Armadas, teniente coronel Peter Lerner, informó de que cazas de la aviación militar habían matado a cuatro milicianos de las Brigadas de los Mártires de Yarmuk un grupo armado jordano que se declara seguidor del Estado Islámico y opera al sur del Golán, en el vértice con las fronteras de Siria y Jordania.
Los yihadistas habían disparado poco antes con una ametralladora pesada montada sobre un vehículo contra posiciones militares israelíes sin causar daños a las tropas, precisó el citado portavoz. Esta filial del ISIS –integrada por islamistas radicales jordanos procedentes de la región de Irbid y en la que no se han alistado milicianos de otros países, según la inteligencia militar israelí– no había actuado hasta ahora contra los soldados que patrullan el Golán.
El Ejército suele replicar con disparos de artillería cuando algún proyectil perdido, procedente de combates entre las facciones de ella guerra civil siria, cae sobre la meseta siria ocupada por Israel o en la zona de separación, que ha vuelto a ser recientemente custodiada por cascos azules de la ONU, pero hasta ahora no había intervenido con contundencia contra una franquicia del ISIS, como las Brigadas de los Mártires de Yarmuk.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Sobre la firma
Más información
Archivado En
- Alepo
- Altos del Golán
- Siria
- Guerra Siria
- Estado Islámico
- Israel
- Primavera árabe
- Territorios palestinos
- Guerra civil
- Palestina
- Terrorismo islamista
- Geopolítica
- Conflicto Suníes y Chiíes
- Protestas sociales
- Revoluciones
- Islam
- Malestar social
- Oriente próximo
- Yihadismo
- Grupos terroristas
- Conflictos políticos
- Asia
- Terrorismo
- Guerra
- Religión