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Detenidos dos militares en México por torturar a una mujer

Un vídeo muestra a los soldados sometiendo a la víctima a asfixia y a malos tratos durante un interrogatorio

Juan Diego Quesada

Dos militares han sido detenidos en México por las torturas a las que fue sometida una mujer durante un interrogatorio en febrero del año pasado. Un vídeo de cuatro minutos, que comenzó a circular este jueves en redes sociales, muestra a una soldado y a una policía sometiendo a la víctima a asfixia y a malos tratos por su presunta vinculación con el crimen organizado. 

La mujer que resiste en el suelo es Elvira Santibáñez Margarito, de 21 años, conocida como La Pala. Fue detenida junto con otros dos hombres el año pasado por su relación con el cártel de la Familia Michoacana, según han informado las autoridades. Actualmente se encuentra presa en el penal federal de Tepic (Estado de Nayarit), condenada por portar un arma de fuego. Pero no cualquiera. Cuando la encontraron llevaba junto a sus compañeros tres AK-47, un AR15, una pistola y 11.000 pesos en efectivo.

"¿Vas a hablar? ¿Ya te acordaste o quieres más?", pregunta en el vídeo la policía militar. A continuación expone a la detenida que tiene dos formas de hacerle hablar a la fuerza. La primera, echándole agua al pañuelo que le tapa la cabeza, lo que le provocaría una sensación de asfixia. Es una técnica muy parecida al ahogamiento fingido (waterboarding en inglés) que utilizaba Estados Unidos con los presos detenidos en las cárceles secretas tras el 11-S. 

Después la amenaza con "darle toques", en referencia a las descargas eléctricas que se les aplica al ganado vacuno en los mataderos. El método no es nuevo, la picana fue un método de tortura muy extendido por la policía y el ejército durante la dictadura Argentina. En otro momento la policía le coloca el arma en la nuca y le aprieta la bolsa de plástico que tiene alrededor del cuello. Mientras trata de sacarle información: "¿Quién es la pinche María?". 

La tortura se ejecutó en febrero del año pasado en Ajuchitlán del Progreso, un pueblo de Guerrero, una región violenta y pobre en disputa del crimen organizado por el tráfico de opio. La Secretaría de la Defensa Nacional informó en un comunicado que la institución recibió el vídeo en diciembre y desde ese momento abrió una investigación. 

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En enero se informó a la Procuraduría -fiscalía- del contenido de las imágenes y pocos días después se detuvo a un capitán y a la soldado policía militar como presuntos responsables de un delito de desobediencia, sin que se especifique si los detenidos aparecen en el vídeo. Ambos están detenidos en una prisión castrense a la espera de sentencia. Se desconoce la situación legal de la policía federal que aparece en las imágenes participando en la tortura.

En el país, embarcado en una ola de violencia desde que el Estado le declarara la guerra a los cárteles de la droga en 2006, hay unos 40.000 soldados patrullando en las calles que hacen labores policiales. Hay un debate abierto entre quienes quieren que vuelvan a los cuarteles y los que los consideran que son la única fuerza capaz de doblegar el poder del narco. 

México enfrenta de nuevo un escándalo por torturas, un método que algunas organizaciones de derechos humanos creen que es sistemático por parte de las autoridades mexicanas. El Gobierno, por su parte, considera que solo es esporádico. Esa diferencia de percepciones abrió el año pasado un conflicto diplomático.

El relator especial de la ONU sobre este tema determinó en febrero de 2015 que la tortura y los malos tratos eran generalizados y que ocurrían en un contexto de impunidad. Estas prácticas vejatorias, en muchos casos, vienen seguidas de la desaparición según ese informe. Para las mujeres incluye capítulos de violencia sexual. México rechazó el estudio por tendencioso y aseguró que solo se trataban de "casos aislados". 

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Sobre la firma

Juan Diego Quesada
Es el corresponsal de Colombia, Venezuela y la región andina. Fue miembro fundador de EL PAÍS América en 2013, en la sede de México. Después pasó por la sección de Internacional, donde fue enviado especial a Irak, Filipinas y los Balcanes. Más tarde escribió reportajes en Madrid, ciudad desde la que cubrió la pandemia de covid-19.

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