“Algo falló en la operación de rescate”

Sobre las 10.30 de la mañana de ayer el barco Dignity I de la ONG Médicos Sin Fronteras recibió una llamada de la central operativa de Roma, el Rescue Control Center de la Guarda Costera italiana. Paula Farias es la coordinadora de este barco de MSF, uno de los tres que la ONG emplea en el estrecho de Sicilia para rescatar a los inmigrantes que intentan llegar a las costas italianas. Según Farias, tras recibir por la central de Roma una primera llamada sobre un barco de madera con 700 inmigrantes a bordo que pedía ayuda, el Dignity I fue desviado hacia otra embarcación, con 94 inmigrantes. La operación tardó unas horas. Una vez finalizada se dirigieron hacia el barco con 700 inmigrantes.

Cuando llegaron, la barcaza ya se había hundido. El buque irlandés Le Niam había llegado primero, pero en el rescate algo falló. El personal de MSF encontró mucha gente en el agua, algunos con salvavidas y otros sin el flotador, luchando para sobrevivir. También vieron algunos de los 25 cadáveres que se recuperarían más tarde.

Pregunta. ¿Algo falló en la operación de rescate?

Respuesta. El rescate es el momento más delicado. Los barcos van totalmente colapsados de gente; con muchísimos sobrepeso. La línea de flotación está muy baja, y es fácil que la gente se mueva. Si esto ocurre, es probable que el barco vuelque.

P. ¿Hay un protocolo de seguridad?

R. Sí, primero intentas acercarte con las lanchas, hablar con los inmigrantes y explicarles que todos serán rescatados. Pero es difícil comunicarte bien, explicar lo que vas a hacer. En este caso, el Le Niam no consiguió hacerse con la situación y el barco volcó.

P. ¿Cuántas personas pudisteis rescatar?

R. Nosotros rescatamos a nueve personas. Los tripulantes del Le Niam nos comentaron luego que recuperaron a 390 personas. Sin embargo, es imposible averiguar cuanta gente había en el barco. Lo que sí está claro es que hay cientos de personas desaparecidas y 25 cadáveres. Pero los números reales, solo el mar lo sabe.

P. ¿Había gente en el interior del barco cuando volcó?

R. Es cierto que había gente en el interior del barco. Pero es imposible saber si salieron antes del hundimiento. Estos barcos van llenos de gente hasta el último milímetro. El precio para embarcarse no es el mismo entre la cubierta y el interior. Ir dentro del barco es más barato porque es un viaje en condiciones tremendas.

P. ¿Hay equipos suficientes para rescatar a los que invocan ayuda desde el mar?

R. Roma tiene muchos avisos diarios de rescate, y no tiene los recursos que necesitaría. Todos los barcos que llaman dicen que está entrando agua, que se están hundiendo, pero no siempre es cierto. Nosotros hacemos a veces dos, tres, cuatro, hasta cinco rescates cada día. Tenemos tres barcos en la zona de rescate, a 30 o 40 millas de las costas de Libia, y es un no parar. Pero Roma, con las herramientas escasas que tiene, está haciendo lo que puede.

P. ¿Esperan más llegadas que en el año pasado?

R. El año pasado [la Operación] Mare Nostrum sacó a 170.000 personas del agua. Era una operación dedicada al rescate y a la búsqueda. [La operación] Tritón, hoy, tiene sobre todo un enfoque de control de frontera, y con medios menores. Ahora mismo, Frontex [la Agencia Europea de Vigilancia en Fronteras] reconoce que Tritón no tiene ni el 13% de los medios que necesita para hacer su trabajo. Y no se trata solo de dinero, sino de medios. Es tremendo que una organización como MSF, que está dedicada a operaciones médicas humanitarias, ejerzamos cómo guarda costas. Y este año hay muchos más inmigrantes que en el año pasado. Es la demostración de que el discurso sobre el supuesto efecto llamada, cuando se ponen más medio, es falso. Este año, con menos medios, hay más gente que cruza el Mediterráneo.