La candidata latina de California al Senado de EE UU se mete en un lío

Apenas dos días le ha durado el entusiasmo a la campaña de Loretta Sánchez, congresista demócrata de California, para convertirse en la primera mujer latina en el Senado de Estados Unidos. Sánchez anunció su candidatura el pasado jueves 14 de mayo y el sábado se metió ella sola en una polémica que le puede costar caro. Durante la convención del Partido Demócrata de California, celebrada este pasado fin de semana en Anaheim, Sánchez identificó a los indios nativos americanos imitando un grito de guerra, ululando con la mano en la boca, en lo que se considera un gesto racista.

Sánchez se encontraba hablando con un grupo de partidarios indios americanos cuando empezó a contar a modo de anécdota que había recibido una llamada de un partidario “indio”. Para definir este término, imitó el grito de guerra. Uno de los asistentes lo grabó en vídeo y se hizo viral en cuestión de minutos. El domingo, Sánchez se disculpó ante los medios.”En la locura de reuniones de ayer dije algo ofensivo y me disculpo por ello. Es duro exponerse y hacer lo que hacen los líderes día sí y día no. Antes o después, todos cometemos errores. Somos humanos”.

Sánchez es la segunda contendiente para ocupar el escaño por California en el Senado de EE UU que va a dejar libre la senadora Barbara Boxer en 2016. Es la gran carrera de los demócratas de California, que no tienen oponentes de peso republicanos. Hasta el pasado jueves, la principal candidata y favorita era otra mujer, Kamala Harris, fiscal general del Estado y de ascendencia negra y asiática. Al ser preguntada por el gesto de Sánchez, Harris dijo sentirse “impactada”. Harris lanzó su carrera por el escaño en enero y ha recibido grandes apoyos. En su puesto de fiscal ha sido una líder en las causas sociales. Durante la convención demócrata, la estrella de la izquierda americana, Elizabeth Warren, le dio su total apoyo para ir al Senado con ella.

No está claro aún cómo va a afectar el incidente a la campaña de Sánchez cuando queda más de un año para las elecciones. Mark Macarro, líder de la tribu Pechanga, dijo a Los Angeles Times estar “decepcionado” con Sánchez. Los indios americanos son una importante fuente de dinero en las campañas políticas en California.

La congresista Sánchez es conocida como una mujer dada a las extravagancias. Despliega una personalidad festiva que es a la vez un potente activo político y una invitación a los malentendidos. Por poner un ejemplo, durante la Convención Demócrata la fiscal Kamala Harris invitó a sus seguidores a un evento titulado “galletas con Kamala”. Sánchez invitó a los suyos a un evento titulado “margaritas y mambo”. En el año 2000, Sánchez organizó un evento para recaudar fondos para Al Gore en la Mansión Playboy de Los Ángeles. El partido le llamó la atención porque Playboy no estaba en sintonía con los valores de defensa de las mujeres y tuvo que cambiar el lugar del evento.

Al mismo tiempo, gracias a su personalidad Sánchez es vista por muchos demócratas de California como una aventurera capaz de cosas impensable. En su currículum tiene el honor de haber sido la mujer que logró el escaño en Washington del condado de Orange, el bastión conservador de la derecha cristiana en California, contra el ultraconservador Robert Dornann en 1996. Sanchez ha renovado su victoria con autoridad en todas las elecciones desde entonces en plena cuna del reaganismo.