Tres muertos en Milán por disparos de un hombre acusado de fraude

Un tiroteo en el Palacio de Justicia de Milán (norte de Italia) ha causado esta mañana la muerte de tres personas. El supuesto autor de los disparos ha sido arrestado por los carabienieri tras huir en moto y ser perseguido durante una media hora. Se trata de Claudio Giardiello, un ciudadano italiano acusado de fraude en la declaración de bancarrota, que esta mañana, ataviado con americana y corbata, asistía a la vista del juicio en su contra sentado entre el público en una de las salas de lo Penal del tribunal milanés.

En torno a las 11.00, el imputado ha sacado un arma y ha empezado a disparar a los presentes. Con un disparo al corazón ha matado al abogado Lorenzo Alberto Claris Appiani, de 37 años, que le había defendido en el pasado y este jueves presenciaba la audiencia en calidad de testigo. Los tiros también hirieron en ese momento de gravedad a otras dos personas.

El sospechoso abandonó entonces la sala, bajó una planta, entró en el despacho del juez Fernando Ciampi, que se ocupaba de quiebras, y le disparó. El magistrado murió en el acto. Giardiello se escondió durante unos minutos en el Palacio de Justicia -que mientras tanto había sido evacuado- y al final logró escapar con una moto. Según confirmó el ministro de Interior italiano, Angelino Alfano, fue capturado tras una persecución de media hora en la localidad de Vimercate, a 30 kilómetros de Milán.

El sospechoso disparó en una sala de vistas y luego mató a un juez en su despacho

"En cuanto escuché los disparos", contó a la agencia Ansa una empleada de 40 años, "y vi cómo huía la gente, me encerré en mi oficina. Pasé mucho miedo". "Estaba en la sala de al lado, en la tercera planta del tribunal", dijo el abogado Marcello D’Elia, "escuchamos cuatro o cinco disparos y enseguida llegaron los carabinieri, que nos ordenaron salir".

Además del juez y del letrado, otro imputado en una causa resultó herido en el tiroteo y falleció tras ser trasladado a un hospital de la ciudad.

El fiscal de Milán Edmondo Bruti Liberati, en una conferencia de prensa, ha precisado que el tiroteo ha causado tres muertes. Según ha indicado, una cuarta persona se está recuperando pero su estado es "grave". Otra persona más, que ha identificado como un abogado, recibió un disparo en una pierna y su estado no reviste gravedad.

La información del fiscal corrige un anterior balance del tiroteo, que los medios habían cifrado en cuatro muertos a partir de los primeros datos procedentes de los servicios de emergencia a falta de confirmación oficial.

Los investigadores analizan si el sospechoso pudo acceder al edificio por una entrada lateral

¿Cómo es posible que alguien con una pistola pueda acceder a un tribunal? Es la pregunta que lanzan vecinos y empleados del Palacio de Justicia a través de los medios italianos que emiten en directo desde Milán. La misma cuestión centra las investigaciones y las declaraciones de los políticos, que han expresado su solidaridad a los familiares de las víctimas y, al mismo tiempo, una fuerte preocupación por la grave brecha en la seguridad de uno de los tribunales más importantes del país, donde se desarrollaron algunos de los juicios más seguidos y mediáticos de las últimas décadas, como el de Manos Limpias a principios de los noventa o los celebrados contra Silvio Berlusconi en época reciente.

Según la fiscalía, los investigadores están analizando la posibilidad de que el sospechoso accediera a los tribunales con un carnet falso por un acceso lateral reservado a juristas y periodistas.

"Hay que averiguar quién, cómo y por qué ha fallado”, afirma Renzi

“¿Cómo es posible saltarse con tanta facilidad los controles en la entrada?”, han preguntado al Gobierno los parlamentarios del Movimiento 5 Estrellas, en la oposición. El caso, como subrayó entre otros Roberto Maroni, presidente de la Región Lombardia (capital Milán), es aún "más chocante" porque "no se trataba de una organización que planificó un ataque e hizo inspecciones previas".

Hasta el primer ministro, Matteo Renzi, ha admitido su inquietud en una rueda de prensa: “Los sistemas de seguridad de nuestro país se apoyan en mujeres y hombres que pueden alcanzar el heroísmo, pero no podemos permitirnos agujeros y fallos en el sistema, como los que hubo hoy". "Hay que averiguar quién, cómo y por qué ha fallado”, ha añadido.

El detenido ha sido descrito como "una persona elegante pero con excesos de agresividad y arrebatos de ira, algo paranoico”. Así lo considera el abogado Valerio Maraniello, exletrado del supuesto autor del tiroteo.