Teodorín Obiang venderá bienes en EE UU para no ser acusado de fraude
Los 30 millones de dólares que vale su casa de Malibú se entregarán a varias ONG
La fortuna en EE UU de Teodorín Nguema Obiang, de 44 años, vicepresidente de Guinea Ecuatorial, acabará en manos de organizaciones de caridad que ayudan al bienestar del pueblo guineano. Más de 40 millones de dólares (31 millones de euros) que varias ONG ajenas al Gobierno del clan Obiang repartirán entre las personas más necesitadas de esta antigua y rica excolonia española de unos 700.000 habitantes, 28.051 kilómetros cuadrados y una renta per cápita de 34.843 dólares en 2010. Una cifra engañosa porque diversos estudios estiman que la mayoría del pueblo guineano vive con un dólar al día.
Acorralado por las pruebas y testimonios que Jennifer Shasky, la directora de la Sección de Lavado de Dinero del Departamento de Justicia y sus sabuesos Roberto Manzanares y Woo Lee han acumulado contra él, Teodorín ha llegado a un acuerdo con la justicia por el que venderá sus principales propiedades en EE UU— una mansión en Malibú, un Ferrari y parte de la iconografía que atesora del cantante Michael Jackson— a cambio de que se retiren las acusaciones de corrupción y blanqueo de capitales. Una victoria de la justicia norteamericana, ya que el acuerdo supone, en opinión de los investigadores, un reconocimiento de que el hijo del dictador adquirió esas propiedades mediante el saqueo y el cobro de comisiones ilegales desde su antiguo puesto de ministro de Agricultura y Bosques.
La joya de la corona de las propiedades que saldrán a subasta es su casa de Malibú, un inmueble que, según la organización Global Witness, tiene vistas al mar, campo de golf de cuatro hoyos, cancha de tenis y piscina, seis habitaciones y ocho cuartos de baño. Está valorada en 23 millones de euros, pero se desconoce el precio real que pagó por ella Teodorín cuando comenzó a invertir en EE UU.
La justicia norteamericana subastará, también, parte de la iconografía del cantante Michael Jackson que el hijo preferido de Obiang compró en subastas por todo el planeta, y con la que esperan recaudar varios millones más. El vicepresidente y probable sucesor ha salvado el guante de cristal Swarovski y otros recuerdos de su ídolo que desde el pasado mes de febrero se exponen en el Centro Cultural Ecuatoguineano de Malabo. El acuerdo establece que si otras propiedades de Obiang como el avión Gulfstream, valorado en 38 millones de euros, vuelven a EE UU serán confiscados con el mismo fin: la ayuda a los pobres.
Se le investigaba por blanqueo de capitales y corrupción
Una comisión judicial francesa dirigida por los jueces Roger Loire y René Grouman visitó hace varias semanas EE UU y ha iniciado el embargo de otras propiedades de Obiang en ese país, según señalan a EL PAÍS fuentes de la investigación. Se trata de dos mansiones en Washington que los jueces franceses pretenden confiscar para cubrir los daños de la causa por blanqueo y corrupción que se sigue en Francia contra el hijo del dictador africano. La justicia francesa está a punto de concluir su causa contra Teodorín, un caso que se sustenta en testimonios de una docena de empresarios, 10 de ellos españoles, que han relatado a los jueces las comisiones ilegales que presuntamente le pagaron durante su larga etapa al frente de la empresa Somagui Forestal , dedicada a la explotación de madera en Guinea Ecuatorial.
Durante la instrucción del caso, Loire y Grouman embargaron a El Patrón, apodo con el que se le conoce en Bata y Malabo, una mansión de 101 habitaciones y 5.000 metros cuadrados en la avenida Foch, en el centro de París, cuadros, estatuas y antigüedades valoradas en decenas de millones. Para garantizar los daños causados ya han subastado su interminable colección de coches de lujo.
investigacion@elpais.es
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