Dos muertos y un herido al estrellarse en Seattle el helicóptero de una televisión

El siniestro se produjo en la mañana del martes, hacia las 7:40 h., en la Fisher Plaza, muy cerca de la famosa torre de Seattle, el Space Needle, un símbolo de la ciudad. De momento se ha confirmado la muerte de dos personas que fallecieron inmediatamente tras estrellarse el helicóptero de la cadena de televisión KOMO-TV e incendiarse, al impactar contra el suelo en la maniobra de aterrizaje.

Los nombres de los fallecidos, facilitados por KOMO, son el piloto Gary Pfitzner y el fotógrafo Bill Strothman, que durante mucho tiempo trabajó para la cadena.

El aparato ha colisionado contra tres vehículos. Uno de ellos estaba ocupado por un hombre de 38 años que logró salir por sus propios medios envuelto en llamas y fue trasladado inmediatamente al Harborview Medical Center. Su estado es crítico y sufre quemaduras en el 50% de su cuerpo, según la portavoz del Hospital, Susan Gregg.

“El helicóptero ha tenido problemas cuando iba a aterrizar”, ha declarado Taylor Van Cise, presentador de KOMO-FM radio en directo desde el lugar del siniestro. “Hay olor a combustible, coches de bomberos y muchos vehículos policiales alrededor”, ha comentado. “Podemos ver donde se ha estrellado el helicóptero y lo que queda de la cola. Una escena muy dramática”, ha seguido comentando en directo.

El lugar del accidente ha sido acordonado con cintas de color amarillo. Los coches de policía y los bomberos han bloqueado las calles desde primeras horas de la mañana para impedir el acceso de vehículos no autorizados.

Una reportera de KOMO radio describía la escena de lo sucedido en los siguientes términos: “Me asomé a la ventana rápidamente tras escuchar el ruido del impacto y vi una bola de fuego. Y vi claramente a una persona saliendo de un vehículo en llamas. Algo totalmente increíble, surrealista, ahí mismo en nuestro edificio”.

“Estamos profundamente conmocionados por la muerte de dos de nuestros compañeros”, el presentador de KOMO, Don Lewis, ha dicho a través de las ondas.

Grandes llamaradas y nubes de humo negro se pueden apreciar todavía en el lugar de los hechos, en el corazón de Seattle, acordonado por los bomberos y la policía.

El portavoz del Seattle Fire Department, Kyle Moore, manifestaba a los periodistas en el lugar de los hechos que “el siniestro podría haber causado mucho más daño, dado que se ha producido en una zona muy transitada, especialmente por la mañana cuando la gente va a trabajar”.

La National Transportation Safety Board y la Federal Aviation Administration van a investigar las causas del accidente.