¿Dónde nació Nicolás Maduro?
El enigmático pasado del presidente venezolano es el caso más representativo de una historiografía bolivariana que se empeña en reinventar la vida de sus líderes
Cuando lo recuerda suele bromear. “Yo nací en Kenia, como Obama”, responde con una sonrisa el presidente Nicolás Maduro para referirse a las insistentes versiones sobre su verdadero lugar de nacimiento. Lo repitió este jueves durante un acto frente al mausoleo donde reposan los restos de Hugo Chávez. Lo hará todas las veces que sea necesario. Es la manera de desestimar una imputación que sus adversarios se toman muy en serio.
El principal portavoz de la versión, según la cual el gobernante venezolano nació en Colombia, es el exembajador de Panamá ante la OEA, Guillermo Cochez. A finales de julio el también exalcalde de la capital de ese país presentó una supuesta partida de nacimiento que indica que Maduro es originario de Cúcuta, una ciudad colombiana fronteriza con los Andes venezolanos, y que nació un año y tres días antes de lo que marca su biografía oficial (Caracas, 23 de noviembre de 1962). Cochez es un acérrimo enemigo de la autodenominada revolución bolivariana desde que criticara, sin consentimiento de su Gobierno, al secretario general José Miguel Insulza por aceptar que se pospusiera la tercera investidura de Hugo Chávez.
Cochez fue destituido por el presidente de su país, Ricardo Martinelli. Desde entonces se ha convertido en un actor más de la política interna local. El diplomático dice tener información que certifica que Chávez falleció en la víspera de Año Nuevo en La Habana. De esto último no ha mostrado pruebas. También fue desmentido por el Registro Civil de Colombia, que alega que el documento exhibido sobre el origen de Maduro es falso.
Parte de la oposición, sin embargo, cree en esa versión. Opacado por la épica construida en torno a Chávez, la vida de Nicolás Maduro luce más bien insignificante. La historiografía bolivariana además se ha empeñado en borrar cualquier vestigio del pasado de sus militantes. Todos parecen haber nacido con Chávez.
El gobernante venezolano es quizá su caso más representativo. De Maduro se conocen detalles aislados que se citan como para reforzar su insignificancia. El director de la Fundación Nuevas Bandas, Félix Allueva, ligado a la promoción del rock venezolano, afirmó en marzo que el presidente estuvo ligado a principios de la década de 1980 a una formación llamada Enigma. Allueva pensaba que Maduro tocaba la guitarra y así lo reveló en las redes sociales al publicar una fotografía de un joven muy parecido al gobernante con una guitarra en bandolera. Poco después se dio cuenta de su error. Era en realidad otra persona.
Maduro lo reconoció en una entrevista con el canal Telesur, pero se ha servido de esa equivocación para construirse un perfil de músico. Salvo ese detalle y algunos otros relativos a la militancia en la Liga Socialista, toda la historia de sus primeros 30 años de vida, esos que transcurrieron desde su fecha de nacimiento hasta el golpe de Estado encabezado por Chávez en 1992, permanecen envueltos en un velo de misterio que el propio jefe de Estado se niega a descorrer.
Sus hermanas María Adelaida y Josefina no tienen vida pública. Lo único claro son los ancestros colombianos del gobernante. El diputado opositor Abelardo Díaz comprobó que la madre del presidente, Teresa de Jesús Moros Acevedo, nació en Cúcuta. Una nota marginal de ese documento que publicó Díaz en su cuenta de Twitter, indica que ella contrajo matrimonio con Jesús Nicolás Maduro en Bogotá “en la parroquia de Nuestra Señora de Fátima de Bogotá el 1 de septiembre de 1956”.
Maduro asegura que nació en la parroquia Los Chaguaramos de Caracas, un sector de clase media trabajadora. A mediados de los ochenta viajó a Cuba financiado por su partido para formarse en la escuela de cuadros del partido comunista. A su regreso, en 1986, trabajó en una imprenta que servía de fachada para la agitación política, según el periodista Roger Santodomingo, autor de la biografía no autorizada De verde a Maduro. En las rotativas Maduro reproducía documentos de los grupos radicales de izquierdas que hacían vida en la Universidad Central de Venezuela.
Quizás ese oficio lo haya acercado a esas organizaciones y a la vida universitaria, aunque en su biografía no destacan estudios superiores. La ocasión de tener un trabajo más estable llegó en 1989 cuando fue contratado como conductor de autobuses del Metro de Caracas, que en aquel entonces inauguraría varias rutas urbanas. De acuerdo con Santodomingo, Nicolás Maduro se presentó a las pruebas para conducir los vehículos después del visto bueno de su partido. “Era la posibilidad de continuar el trabajo político y penetrar el sindicato”, explica el periodista.
Maduro fue uno de los entusiastas que se sumó a las riadas que visitaban a Chávez en la cárcel donde estaba preso. Desde entonces y hasta el 8 de diciembre de 2012, cuando el caudillo lo nombró como su delfín, se colocó como el más fiel de sus discípulos. Santodomingo dice que fue un hombre disciplinado y efectivo para los fines del comandante, pero con el defecto de no ser formado como un líder. “No por ello se le puede subestimar. Es fácil hacerlo por sus constantes equivocaciones. Lo recomendable es conocerlo antes de evaluarlo. Es una persona compleja”, declara el biógrafo.
Santodomingo niega que Maduro haya nacido en Colombia. Lo contrario significaría una crisis política. La Constitución venezolana indica que el jefe del Estado debe ser venezolano por nacimiento. Pero el 4 de julio de 2013, quizá adelantándose a esa polémica, la fiscal general de la República Luisa Ortega Díaz dijo: “De acuerdo con nuestra Constitución la nacionalidad venezolana no se pierde al optar o adquirir otra nacionalidad”.
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