Aumenta la presión de la Justicia sobre Lula

La Policía Federal abrió ayer una investigación criminal para analizar la posible participación del expresidente Lula da Silva en el escándalo de corrupción política, conocido como mensalão. Es la primera vez que la policía abre una investigación contra Lula como uno de los posibles responsables de aquel escándalo que acabó condenando a 25 imputados, entre ellos a la cúpula del Partido de los Trabajadores (PT), y absolviendo a 12 de los acusados.

La Policía ha abierto la investigación a petición de la Fiscalía General de la República del distrito federal de Brasilia. Al no tener fuero Lula, el Fiscal General de la Unión, Roberto Gurgel, pasó las acusaciones del empresario Marcos Valerio, condenado en el mensalão a 40 años de cárcel, a la Fiscalía regional.

Valerio acusó a Lula ante Gurgel en septiembre pasado de haber participado personalmente en una transferencia de siete millones de reales ( 3,5 millones de dólares), de Portugal Telecom para financiar deudas de su partido, el PT. La transferencia habría sido hecha a través de Macao, en China, haciéndola aparecer como pagos a los jefes de imagen de Lula. La Policía Federal tiene ahora de 30 a 60 días para dar su parecer sobre dichas acusaciones o archivarlas.

El Partido de los Trabajadores ha preferido minimizar la noticia de la investigación. “Se trata de una de las muchas invenciones que se crean para intentar llegar al expresidente Lula, cuyo único 'crimen' fue el de mejorar la vida de millones de brasileños”, ha comentado Ruy Falcão, presidente del PT. Falcão ha puntualizado que la investigación criminal no es “contra Lula”, sino una investigación para saber si la campaña sobre él fue o no financiada ilegalmente.

A su vez, el Director del Instituto Lula, el exministro Luiz Dulci ha afirmado que se trata de una “noticia vieja” que no vale la pena comentar. Lula también ha preferido el silencio: “No comento esas noticias”, afirmó días atrás en París.

El ministro de Justicia, José Cardozo, del Partido de los Trabajadores (PT) ha preferido mantenerse en su traje de gobierno y ha afirmado ayer que la Policía Federal “goza de autonomía para investigar al expresidente Lula en el caso del mensalão”. Y añadió: “La Policía es apta para investigar cualquiera de los crímenes de su competencia”. Según Cardozo, la policía “ es republicana” y no está sometida a “ningún tipo de interferencia de cualquier naturaleza”.

El caso que investiga la policía, ha recaído en manos del departamento al Combate a los Crímenes Financieros.