_
_
_
_
_

Kerry busca reanudar el proceso de paz con un plan económico para Cisjordania

El Secretario de Estado de EE UU acaba un viaje de dos días a Israel y los territorios palestinos Washington busca que Jordania se implique más en el proceso negociador

El secretario de Estado estadounidense, John Kerry, anunció este martes, al término de un viaje oficial a Israel y los territorios palestinos, que presentará en los próximos días un plan de dinamización de la economía de Cisjordania, en un intento de dar respaldo y legitimidad a la Autoridad Palestina y al partido Al Fatah. Es una nueva actitud en la intervención de Estados Unidos en el proceso de paz, centrada, de forma pragmática, en fomentar el comercio y la creación de riqueza de los palestinos, antes de pasar a la reanudación del proceso político.

Kerry ha logrado, en un viaje de dos días a Israel y Cisjordania, el apoyo del primer ministro Benjamín Netanyahu en este cometido. “Hemos acordado que vamos a tomar parte en nuevos esfuerzos, esfuerzos muy específicos, para promover el desarrollo económico y para eliminar algunos de los bloqueos y las barreras que existen sobre el comercio de Cisjordania”, dijo Kerry en una conferencia de prensa en Tel Aviv antes de abandonar Israel. El jefe de la diplomacia norteamericana añadió que la semana próxima, en Washington, ofrecerá todos los detalles del nuevo plan.

Vamos a tomar parte en nuevos esfuerzos, esfuerzos muy específicos, para promover el desarrollo económico y  eliminar los bloqueos y las barreras que existen sobre el comercio de Cisjordania" John Kerry

Kerry se reunió con Netanyahu el lunes y el martes. Tras los encuentros, el primer ministro israelí dijo estar decidido “no sólo a reanudar el proceso de paz con los palestinos, sino a hacer un serio esfuerzo para poner fin a este conflicto de una vez”. “Esto tiene componentes económicos. Damos la bienvenida a cualquier iniciativa que usted y otros avancen en este sentido. Y esto también tiene un componente político. Las discusiones políticas deben abordar una gran variedad de temas, sobre todo, las cuestiones del reconocimiento y la seguridad”, añadió.

Netanyahu insistió de ese modo en que cualquier pacto con los palestinos debe incluir un reconocimiento a Israel como Estado del pueblo judío y debe contener garantías de seguridad para la población de ese país. En el pasado, a través de sus negociadores, el primer ministro israelí ha indicado que podría considerar una retirada parcial de una gran mayoría de las zonas que controla en Cisjordania desde 1967 si la Autoridad Palestina acepta una presencia militar de Israel en el valle del Jordán durante un periodo de tiempo futuro no especificado.

Nos comprometemos no sólo a reanudar el proceso de paz con los palestinos, sino a hacer un serio esfuerzo para poner fin a este conflicto de una vez por todas" Benjamín Netanyahu
Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Según fuentes de la diplomacia norteamericana, Kerry busca que Israel y la Autoridad Palestina acepten sentarse a negociar en Ammán junto a representantes de Estados Unidos y de Jordania. El Secretario de Estado tiene la intención de implicar al reino hachemita en las negociaciones, sobre todo en la definición del estatuto de Jerusalén, que ambas partes reclaman como capital, y en cuya parte oriental, ocupada en 1967, Israel ha expandido notablemente los asentamientos de colonos judíos.

Jordania firmó un acuerdo de paz con Israel en 1994. Previamente, en 1988, había renunciado a la soberanía sobre los terrenos de Cisjordania que había controlado hasta la guerra de 1967, abriendo de ese modo la vía a la creación de un Estado palestino soberano. El 31 de marzo el rey Abdalá II firmó en Ammán un acuerdo con Abbas, por el que reino hachemita se compromete a proteger los sitios sagrados musulmanes y cristianos de Jerusalén.

Este es el tercer viaje de Kerry a la zona en menos de un mes. El domingo por la noche se reunió en Ramala con Mahmud Abbas, presidente de la Autoridad Palestina, a quien le aseguro que es capaz de lograr ciertas concesiones por parte de Israel, como una retirada de parte de los terrenos que controla civil y militarmente en Cisjordania, o que no se vuelva a retener la transferencia de impuestos recaudados, que se suelen emplear para pagar los salarios de los funcionarios palestinos. Abbas había exigido previamente que Netanyahu acuda a la mesa de negociaciones con un mapa, con la propuesta de Israel de qué límites tendría un Estado palestino.

Una de las principales exigencias de Abbas es que Israel acepte excarcelar a una parte considerable de los 4.800 presos palestinos. La Autoridad Palestina ha insistido, en negociaciones previas, en la liberación de, al menos, los 120 presos que se hallan en cárceles de Israel desde antes de 1993, fecha de la firma de los acuerdos de Oslo. En las pasadas semanas, la muerte de dos presos palestinos bajo custodia de Israel ha provocado numerosos disturbios y enfrentamientos de manifestantes contra las Fuerzas de Defensa de Israel.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_