Un tribunal de Argentina condena al expresidente Menem por contrabando

El senador argentino Carlos Menem, cuyo largo gobierno (1989-1999) fue un tiempo de privatizaciones, apertura económica y casos de corrupción, fue condenado este viernes por el máximo tribunal penal de su país en una causa por contrabando de armas a Croacia y Ecuador. Pese a las múltiples denuncias de delitos contra el peronista Menem y sus funcionarios, el expresidente jamás había sido sentenciado hasta ahora. Solo había cumplido arresto domiciliario por unos meses en 2001 por esta misma causa. La Cámara Federal de Casación Penal revocó el fallo de un tribunal de menor rango que lo había absuelto en 2011 y le ordenó a esos tres magistrados que lo habían exculpado que ahora fijen las penas de prisión, que podrían de extenderse de cuatro a 15 años.

Pero Menem, de 82 años, por ahora no irá a la cárcel. Sucede que en 2011 fue reelegido como senador por su provincia, la norteña La Rioja, y, por lo tanto, goza de fueros parlamentarios. Para que pierda esa inmunidad, deberían ponerse de acuerdo dos tercios de los miembros del Senado. En otras palabras, se necesita que el kirchnerismo, que controla la mayoría absoluta de la cámara, decida expulsarlo. Habrá que ver qué sucede porque Menem, que en 2003 abandonó unas elecciones presidenciales ante la previsible victoria de su correligionario Néstor Kirchner, ahora respalda al Gobierno de Cristina Fernández y en algunas oportunidades le ha aportado votos clave en el Senado.

Menem fue el presidente que acabó con la hiperinflación de 1989/1990 e instauró un régimen monetario por el que un peso equivalía un dólar, el mismo que estalló por los aires dos años después de dejar el gobierno. Fue el líder de años de crecimiento, después tachado de insostenible, que se amalgamaba con un creciente desempleo. Fue también quien abrió la economía argentina y emprendió privatizaciones generalizadas, en procesos muchas veces sospechados de corrupción. Fue también quien indultó a los jefes de la última dictadura militar (1976-1983), los mismos que lo habían apresado durante cinco años a él, cuando era gobernador de La Rioja. Encarnó un nuevo modelo peronismo girado al neoliberalismo, camino que los Kirchner han procurado desandar en los últimos diez años.

Aquel presidente playboy que conducía una Ferrari fue condenado ahora por firmar tres decretos secretos por los que autorizó entre 1991 y 1995 la venta de material bélico a Panamá y Venezuela, pero que en realidad acabó en dos países sobre los que regían embargos de armas de Naciones Unidas: Croacia y Ecuador. El país europeo se encontraba en plena guerra para independizarse de la entonces Yugoslavia, dominada por Serbia. Ecuador protagonizó en 1995 un conflicto bélico con Perú por diferencias limítrofes. Argentina era uno de garantes de paz entre ambos países por el diferendo que los había enfrentado ya con las armas en 1941 y 1981. La noticia del contrabando irritó por demás a Perú, que había sido uno de los pocos países latinoamericanos que había ofrecido apoyo militar a Argentina durante la Guerra de Malvinas (1982) contra Reino Unido.

En 2011, un tribunal había exculpado a Menem y a otros 17 acusados, incluidos funcionarios y traficantes de armas. Ahora la Cámara de Casación ha exculpado a tres y ha condenado al exjefe de Estado y a otros 14 imputados, incluido el exministro de Defensa Oscar Camilión.