Kerry asume su cargo al frente del Departamento de Estado
El exsenador establece como prioridad para su mandato preservar la seguridad de los diplomáticos estadounidenses en el mundo
John Kerry se ha dirigido esta mañana a sus nuevos colegas de trabajo desde las mismas escaleras del Departamento de Estado en Washington desde las que su predecesora Hillary Clinton se despidó el pasado viernes. “Desde aquí podemos hacer las mejores cosas que se pueden hacer en el Gobierno. Podemos tratar de lograr la paz, podemos sacar a la gente de la pobreza, podemos dar voz a quienes no la tienen y defender los derechos humanos”, ha dicho Kerry.
En un plano más concreto, el nuevo secretario de Estado ha declarado que su máxima prioridad será la seguridad de los diplomáticos estadounidenses en el mundo. “Les garantizo que, a partir de esta misma mañana, todo lo que haga se centrará en la segurida de nuestra gente”. A pesar de ser su primer día en Foggy Bottom –donde se encuentra la sede del Departamento de Estado-, no lo era en cuanto a actividad laboral, ya que Kerry ha pasado parte del fin de semana realizando llamadas telefónicas a distintos líderes mundiales. El domingo conversó con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y con el presidente palestino, Mahmud Abbas, para asegurar a ambos que el presidente Barack Obama seguirá a la busca de un acuerdo de paz en Oriente Próximo, sin dejar de reconocer los intereses de ambas partes.
En su primer fin de semana al frente de la diplomacia estadounidense, Kerry también habló telefónicamente con el primer ministro de Japón, Fumio Kishida, y con el ministro de Exteriores surcoreano, Kim Sung Hwan. El exsenador conversó sobre el atentado suicida del viernes en la embajada de EEUU en Ankara con su homólogo turco, Ahmet Davutoglu.
En una nota más distendida, Kerry ha bromeado esta mañana tras ser recibido con aplausos y vítores a su llegada .“Esta es la gran pregunta que enfrenta el país, el mundo y el Departamento de Estado después de los últimos ocho años: ¿Puede un hombre liderar el Departamento de Estado?”, ha declarado entre risas, en referencia a que la gestión de Hillary Clinton estuvo precedida por la de otra mujer, Condoleezza Rice. “Sin duda”, ha proseguido con la broma Kerry, “tengo grandes tacones que llenar”.
El exsenador por Massachusetts ha agradecido a su predecesora y a su equipo “su dedicación” y esfuerzo. “He hablado con Hillary y se que está orgullosa de vuestro trabajo”. Kerry también ha considerado que “es incuestionable lo que ha hecho nuestro presidente para restituir el prestigio de EE UU en el mundo”. El nuevo secretario ha rememorado esta mañana sus palabras de despedida en el Senado. "Dije que llevaba el Senado en mi sangre, pero también llevo la diplomacia", ha recordado Kerry mientras blandía su primer pasaporte diplomático, el que se hizo cuando tenía 12 años para viajar con su familia al Berlín dividido de 1954.
Según ha relatado Kerry, el servicio exterior está en sus genes -su padre trabajó para la diplomacia de EEUU y fue abogado en Naciones Unidas-. En aquella visita a Alemania, un joven Kerry cruzó el muro a la Alemania del Este sin permiso paterno. La aventura –como la ha calificado el exsenador- le costó un largo castigo. “Pero aprendí una gran lección sobre el valor de la libertad”, ha dicho. “Esa aventura fue grandiosa y hoy, 57 años después, empiezo esta otra”, ha finalizado. "Con nuestro trabajo hacemos mejor a nuestro país", ha asegurado Kerry. "Estoy orgulloso de ustedes”, ha proseguido antes de despedirse y decir: “Ahora, vuelta al trabajo”.
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