Samarás advierte que con Grecia está en juego “la estabilidad de toda la zona euro”

El primer ministro griego, Antonis Samarás, ha advertido este miércoles por la mañana a sus socios europeos y a los organismos acreedores de su país que “la estabilidad de toda la zona euro” depende de que se llegue a un acuerdo para liberar una ayuda financiera a Grecia que está entre los 31.300 millones o 44.000 millones en los próximos meses. El fracaso de las conversaciones llega en vísperas de una nueva cumbre europea, el jueves y el viernes de esta semana, para cerrar el presupuesto de la UE. Oficialmente, la reunión ha sido pospuesta hasta el próximo lunes, 26 de noviembre, para perfilar detalles técnicos.

“Nuestros socios y el FMI tienen el deber de hacer lo que han asumido, no es solamente la ayuda a nuestro país sino la estabilidad de toda la zona euro lo que depende del éxito de este esfuerzo en los próximos días”, ha declarado Samarás en un comunicado citado pro France Presse.

Tras 12 horas de negociaciones, los ministros de Finanzas de la Eurozona, el BCE y el FMI, no fueron capaces de ponerse de acuerdos en la noche del martes sobre aspectos técnicos de la ayuda a Grecia. El principal punto de desacuerdo es la posibilidad de conceder a Grecia dos años más de lo previsto (hasta 2022) para reducir su deuda pública hasta el 120%, como propone el Eurogrupo. El FMI, por su parte, quiere que el objetivo se cumpla en 2020, aunque ello suponga una restructuración de deuda, algo que los países de la Eurozona no desean.

"Cualquier dificultad técnica a la hora de encontrar una solución técnica no es excusa para ninguna laxitud o retraso", afirmó Samarás en el comunicado. "Grecia ha hecho todo aquello a lo que se había comprometido. Nuestros socios, incluido el FMI, tienen que hacer también todo aquello a lo que se han comprometido", añadió.

El comunicado final de la reunión de ministros de Finanzas de los países de la zona euro subraya que Grecia ha cumplido "de manera satisfactoria" con las acciones requeridas como condición para el desembolso del nuevo tramo de ayuda financiera.

Esas acciones incluían -continúa el comunicado- nuevas y duras medidas de austeridad y un presupuesto severamente recortado, pero asegura que deberán discutirse cuestiones "técnicas" y se celebrará una nueva reunión el próximo lunes 26.

La izquierda Syriza, el principal partido de la oposición, también se ha mostrado muy crítica con la decisión del Eurogrupo, además de con las medidas adoptadas para recibir el nuevo tramo de 31.500 millones de euros. "El gobierno está haciéndoles todos los favores que le piden y, a cambio, está recibiendo humillaciones", afirmó el diputado de Syriza Dimitris Papadimulis.

Ante el escenario de incertidumbre que se abre estos días, el ministro de Economía francés, Pierre Moscovici, dijo que el grupo está "muy cerca" de llegar a un acuerdo. Según declaraciones de Moscovici a la emisora Europe 1, citadas por Efe, "el encuentro finalizó muy cerca de un acuerdo, aunque faltan todavía algunos parámetros por solucionar, como la manera de bajar las tasas de interés de los préstamos que se han otorgado a Grecia".