Los periodistas mexicanos reivindican que no haya "ni un muerto más"

La plaza del Ángel de la Independencia, en la capital mexicana, fue el escenario elegido por más de un centenar de profesionales de los medios de comunicación para depositar en la tarde del sábado una corona de flores con la leyenda "Gobierno mataperiodistas" y decenas de velas a sus pies.

El motivo de la protesta, el reciente asesinato de varios reporteros en el Estado oriental de Veracruz, por el que los manifestantes reclamaron justicia y pidieron que no haya "ni un muerto más".

Aristegui se refería al asesinato de la corresponsal de la revista Proceso en Veracruz, Regina Martínez, el pasado 28 de abril, y de dos reporteros gráficos, Gabriel Huge y Guillermo Luna, y del exfotoperiodista Esteban Rodríguez, cuyos cuerpos aparecieron el pasado jueves en Veracruz desmembrados y con señales de tortura.

Según el manifiesto leído por Aristegui, en Veracruz hay "una ausencia de libertad de expresión", el pensamiento crítico "carece de espacios" y el periodismo se ha convertido "en un ejercicio de alto riesgo".

El columnista de la revista Proceso Álvaro Delgado leyó otro comunicado dirigido al presidente Felipe Calderón y a las autoridades de Veracruz en la que se expresa la consternación por estos crímenes, "que no son", dijo, "un hecho aislado". Posteriormente fueron enumerados los profesionales de los medios de comunicación que han perecido en México en los últimos años. Tras cada nombre los asistentes coreaban: "No debió morir".

Desde el año 2000, más de 70 periodistas han sido asesinados en México, según datos de la ONU. La organización de defensa de la libertad de prensa Artículo 19 denuncia que en todo 2011 hubo 172 agresiones relacionadas con violación de los derechos de los periodistas.