Rusia aprueba una reforma política en vísperas de las elecciones
Las nuevas leyes corrigen restricciones a los partidos políticos impuestas bajo el mandato de Putin, gran favorito a la victoria el domingo
La Duma Estatal de Rusia (Cámara baja del parlamento) aprobó el martes en primera lectura tres leyes de reforma política (de las cuatro presentadas por el presidente Dmitri Medvédev) en una sesión en la que, por primera vez, fueron invitados líderes de partidos excluidos del juego parlamentario por haberles sido denegado el registro legal en el ministerio de Justicia.
Medvédev envió todos los proyectos de ley a la Duma después de los grandes mítines del 10 y el 24 del pasado diciembre que sacaron a la calle a decenas de miles de personas en protesta por las irregularidades y fraudes (en su mayoría no reconocidos oficialmente) en las Legislativas. Las leyes aprobadas el martes revisan y corrigen muchas de las enmiendas restrictivas que fueron aprobadas durante los dos mandatos presidenciales de Vladímir Putin (2000-2008) y la presidencia de Medvédev.
A tenor de las leyes aprobadas hoy, se liberaliza la presentación de candidatos electorales y también el procedimiento de registro de partidos políticos. Asimismo, a partir de enero de 2013 se restablece la elección de los gobernadores provinciales, que pasaron a ser nombrados en otoño de 2004, por iniciativa de Vladímir Putin. Una cuarta ley, que se debatirá después de los comicios presidenciales del 5 de marzo, modificará el sistema de formación del parlamento (actualmente proporcional por listas de partidos).
Garry Minj, el representante presidencial en la Duma, manifestó que las leyes de la reforma política estaban preparadas desde mediados de 2011, pero la oposición sostiene que han sido propiciadas por las movilizaciones populares y por esta razón los textos están bastante “verdes”, como afirmaba el líder comunista Guennadi Ziugánov. En el debate parlamentario afloraron las incertidumbres sobre el futuro y la desconfianza hacia el Kremlin, propiciada por las últimas elecciones. El líder de Rusia Justa, Serguéi Mirónov, manifestó que los tribunales no han fallado todavía sobre 221 actas electorales que, según su partido, fueron falsificadas en las elecciones al consistorio municipal de San Petersburgo (celebradas también en diciembre). Mirónov recordó que las novedades legislativas del presidente no son tales porque suponen la vuelta a la legislación vigente en los años noventa. Por su parte, el líder comunista, Guennadi Ziugánov, se refirió a la necesidad de elecciones honradas e insistió en la necesidad de debatir y aprobar leyes que refuercen el control de las urnas y el recuento.
Según la reforma esbozada el martes, para registrar un partido bastará con un total de 500 miembros, en lugar de los 40.000 afiliados que se necesitaban hasta ahora. Los partidos sin representación en la Duma, por su parte, no necesitarán firmas para competir en las Parlamentarias (en la actualidad requieren 100.000 firmas). Estos partidos también podrán presentar sus candidatos a la presidencia del Estado previa recogida de 100.000 firmas (en la actualidad 2 millones de firmas). Los candidatos que compitan por cuenta propia por la presidencia tendrán suficiente con 300.000 firmas, en lugar del aval de 2 millones de firmas que necesitaban antes.
Para su aprobación definitiva, las leyes requieren de otras dos lecturas en la Duma, además del voto en la cámara alta o Consejo de la Federación y la firma del presidente del Estado. La segunda lectura, en la que se podrían introducir enmiendas de detalle que redujeran la liberalización inicial, se celebrará ya tras las elecciones presidenciales y en la recta final de la gestión presidencial Medvédev, que cederá oficialmente el cargo a su sucesor a principios de mayo.
La reforma política fue apoyada de forma casi unánime por los cuatro partidos con representación en la Duma (una cámara con 450 escaños), Rusia Unida, el partido mayoritario, Rusia Justa, el Partido Liberal Democrático de Vladímir Zhirinovski, y el Partido Comunista. Solo dos diputados votaron en contra de la ley de eleccion de gobernadores, que mantiene cierta ambigüedad sobre el llamado “filtro” presidencial, a tenor del cual el presidente del Estado podría tener derecho a vetar a los candidatos a los puestos de máxima responsabilidad en las provincias.
En un gesto de apertura a la oposición, el 20 de febrero, Dmitri Medvédev se reunió con los líderes de los partidos que no están representados en la Duma y de los partidos que no han sido registrados y les invitó a colaborar. A resultas de aquella reunión se han formado grupos de trabajo que integran a representantes de los partidos de oposición. Estos han elaborado una lista de enmiendas a las leyes aprobadas hoy. En Rusia hay siete partidos políticos legales (cuatro de los cuales están representados en la Duma).
Medvédev admite que Yeltsin falsificó las presidenciales
Anonadados. Así quedaron algunos de los dirigentes de partidos no registrados que el lunes 20 de febrero participaron en una larga reunión con el presidente de Rusia, Dmitri Medvédev, en las afueras de Moscú. En cierta manera, era una reunión histórica, porque Medvédev se abría al diálogo con la oposición marginalizada y demonizada durante varios años.
Lo que impactó a los presentes fue un comentario que Medvédev realizó de forma ligera cuando la discusión transcurría a puerta cerrada. Según fuentes presentes en el encuentro, Vladímir Rizhkov advirtió a Medvédev que la falta de elecciones limpias puede ser mala para la legitimidad del sistema. Entonces, según estas fuentes, Medvédev exclamó: “(Borís) Yeltsin perdió las elecciones de 1996 y todo el mundo lo sabe”. Según Serguéi Baburin, uno de los asistentes, el presidente habría dicho: “Difícilmente alguien tiene dudas de quien venció en las elecciones presidenciales de 1996. No fue Boris Yeltsin”. El tono de Medvédev parecía implicar que también entonces se habían falsificado las elecciones y aquello no había tenido ningún resultado negativo desestabilizador, señalaron las fuentes. En 1996, Boris Yeltsin fue declarado vencedor en segunda vuelta contra el líder comunista Guennadi Ziugánov. Durante el mitin del 10 de diciembre un miembro del equipo de Yeltsin reconocía a esta corresponsal que las elecciones habían sido falsificadas. Fuentes del Kremlin han negado que Medvédev hubiera pronunciado la frase que se le atribuye. No obstante, fuentes del Kremlin que no quieren identificarse, confirman que el presidente pronunció la frase con el sentido que se le atribuye.
En la tribuna de invitados estaban Vladímir Rizhkov, presidente del partido Republicano (cuyo registro legal fue anulado por el ministerio de Justicia), y Vladímir Udalzov, que intentó registrar sin éxito su partido RotFront. Ante la perspectiva de la liberalización, el ministerio de Justicia ha recibido ya cerca de setenta peticiones para iniciar los trámites para registrarse como partidos. Algunos analistas creen que Rusia Unida intenta crear un paisaje de partidos “enanos” que no representan ninguna competencia para su posición fortalecida por el control de recursos administrativos.
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