"Estados Unidos apoyará a España en este momento difícil"

Lleva solo cuatro meses en el cargo, pero Kathleen Doherty ha aprendido ya la primera de las lecciones de quien tiene como misión ocuparse de Europa: si uno quiere conseguir sus objetivos, debe multiplicar sus viajes por todas las capitales que cuentan, porque Bruselas no es suficiente. La subsecretaria del Departamento de Estado para Asuntos Europeos ha venido a España para entablar los primeros contactos con el Gobierno de Rajoy, al que ofrece todo su apoyo, y anima a Europa a apostar por las políticas de crecimiento y no sólo de austeridad.

Pregunta. La UE acaba de consagrar la austeridad frente a la política de estímulos de EE UU. ¿Su opinión?

Respuesta. El pacto fiscal es un buen comienzo y las decisiones que se están tomando nos reconfortan, pero quisiéramos ver más avances en materia de crecimiento. Sé que en la cumbre de este lunes se identificaron algunos aspectos, pero quisiéramos ver más en este sentido. Porque si miras los datos de contracción y recesión en algunos países europeos ves que sin abordar el tema del crecimiento adecuadamente Europa puede tener problemas en su recuperación y su futuro.

P. ¿En qué medida se siente afectado EE UU por lo que está pasando en Europa?

Nos gusta ver que Europa toma las decisiones por sí mismos.

R. La preocupación por nuestros intereses es muy alta. Nuestras economías están tan vinculadas que lo que ocurre aquí nos afecta, y viceversa. En EE UU vemos ya tendencias positivas —el dato del último trimestre del PIB, el paro cayendo—, pero nuestro potencial para recuperarnos plenamente estará afectado por lo que hace Europa y por eso queremos realmente que Europa acierte en su tratamiento de la crisis. El comercio en ambos sentidos, las exportaciones, las inversiones y nuestras recuperaciones dependen mutuamente, el uno del otro, en gran medida. Por ello observamos muy atentamente lo que ocurre. Muchas de las cuestiones son internas de la UE y no le corresponde a EE UU decir cuál es la medicina correcta en cada situación, pero observaremos atentamente lo que está ocurriendo.

P. Timothy Geithner vino recientemente a Europa para pedir medidas enfocadas al crecimiento. ¿Cree que Europa está abierta a estos consejos y están ustedes programando más iniciativas?

R. Nos gusta ver que Europa toma las decisiones por sí mismos. El gobierno español está hablando de la necesidad de fomentar el crecimiento, el gobierno italiano también, así que nos reconforta ver que el estímulo al crecimiento está convirtiéndose en una prioridad en Europa, y no porque lo diga EE UU. Pero continuaremos insistiendo en ello y animando a Europa, ya sea en relaciones bilaterales o a través de Bruselas, a plantearse un programa para el crecimiento.

P. ¿Le preocupa la debilidad política creciente de Europa si la crisis avanza?

Vemos la relación bilateral [entre España y EE UU] fuerte y queremos hacerla aún más fuerte y duradera

R. Europa es para nosotros un aliado esencial para muchos asuntos globales, desde el norte de África o la no proliferación a los desafíos económicos. Europa siempre será un socio estratégico. Algunos recortes presupuestarios afectarán a capacidades concretas y tenemos que explorar en qué dirección avanzamos con Europa en el nuevo escenario presupuestario.

P. La nueva estrategia militar de Obama marca como nuevas prioridades el pacífico asiático, Irán. ¿Qué cambia esto para Europa?

R. No hay ninguna diferencia para Europa, no es una ecuación de suma cero. Nuestro compromiso con el pacífico asiático no significa que no tengamos el mismo nivel de compromiso con Europa. Vemos a la OTAN como una alianza fundamental para la seguridad y estabilidad, vemos a Europa como socio indispensable. El compromiso con Asia debe animar a Europa a trabajar con nosotros también en esa área.

P. ¿Es la operación en Libia el modelo de la relación militar con Europa en el futuro?

R. Estamos en fase de aprender las lecciones de la operación en Libia. Una intención de la cumbre de OTAN es aprender esas lecciones, entre los socios convencionales de la OTAN y entre los socios no convencionales, como los países del Golfo en Libia y si lo usamos como modelos. Qué funcionó y qué no. Esa será tarea de la cumbre de la OTAN.

P. Resuelto el objetivo militar en Libia, sin embargo, se abren todas las incógnitas políticas. ¿Qué lecciones debemos aprender de ello?

R. Europa debe estar comprometida con la primavera árabe. El éxito solo se dará si trabajamos juntos, promoviendo el desarrollo económico, tenemos que afrontar juntos esta cuestión. Tenemos también la obligación de promover transparencia y rendición de cuentas, y nuestras compañías juegan un papel importante. La UE y EE UU estamos dando el mismo mensaje respecto a Siria y compartimos las mismas preocupaciones y trabajamos en este sentido con los países, con las instituciones de Bruselas y con la OTAN.

P. ¿Es más importante ahora tratar con los líderes de los países o con la UE?

R. Ahora la acción está en Nueva York y la discusión en el Consejo de Seguridad. Así que el trabajo diplomático depende de las cosas concretas: ahora del Consejo de Seguridad y por tanto de estados individuales que forman parte del mismo. Pero en lo que se refiere a sanciones trabajamos con la Unión Europea. Si son cuestiones de asistencia al desarrollo podemos trabajar tanto bilateralmente como con la UE. No son exclusivas, todas las instancias forman parte de la ecuación.

P. La oposición en Siria ha logrado avances gracias a soldados desertores ¿cree que estos cambios permitirán hablar en un momento dado de una acción militar exterior?

R. No quiero comentar porque la discusión está en Nueva York, no está en mi nivel. Tendremos mayor idea cuando sepamos si hay resolución o no hay resolución sobre Siria, es una cuestión muy importante.

P. Rusia es el problema, que sí es su competencia.

R. ¡Afortunadamente no todos los días! (ríe)

P. ¿Por qué esta oposición tan dura de Rusia? ¿Cómo pueden los países occidentales cambiar esa postura?

R. En cuestión de la primavera árabe, Rusia se ha sentido marginada de las discusiones. Ahora mismo está claramente en contra de una resolución, pero las cosas sobre el terreno están cambiando muy rápidamente y en un momento dado los rusos podrán flexibilizar su posición. Deberán evaluar por sí mismos las repercusiones de no tener una resolución.

P. El embargo de Europa a Irán tendrá costes económicos para nosotros. Cambiar a los proveedores de petróleo es caro y añade nuevos costes, mientras China o India continúan comprando su petróleo. ¿Lo han medido bien, esas pérdidas?

R. Lo estamos hablado con los líderes europeos, hemos apreciado mucho las sanciones que ha adoptado la UE, sabemos que no son decisiones fáciles y que tendrán impacto, pero sabemos que ya están teniendo impacto en Irán. No sabemos cuán efectivas serán pero creemos que conseguiremos mucho con el apoyo de la UE. En cuanto a la provisión, tanto la legislación de EE UU y de UE contemplan periodos de revisión para estudiar la situación y eso será decisión de la Casa Blanca. Pero no vemos graves trastornos en el mercado del petróleo.

P. La relación de Bush y Zapatero fue problemática, la de Zapatero y Obama fue buena, ¿Cómo será la de Obama y Rajoy?

R. Valoramos mucho la relación con España, el nuevo gobierno ha tomado medidas duras en sus primeras semanas para afrontar los problemas económicos y queremos apoyar a fondo a la Administración de Rajoy. Vemos la relación bilateral fuerte y queremos hacerla aún más fuerte y duradera en muchísimos asuntos. Pero especialmente en lo económico será de apoyo a España en este momento difícil.

P. ¿Están trabajando en una visita o un encuentro?

R. Se me ha planteado hoy y lo trasladaré a Washington.

P. Zapatero en su último momento firmó con EE UU un acuerdo para desplegar aquí parte del escudo antimisiles. ¿Qué recibirá España a cambio?

R. Esperamos que continúe el acuerdo, que fortalece a España como socio estratégico. La voluntad de España de albergar los misiles Aegis ha sido para nosotros una prueba fundamental de la fortaleza de nuestra relación y una indicación de que España quiere ser un socio estratégico fundamental. Sé que era una decisión difícil y lo valoramos. Los beneficios serán impresionantes.

P. Europa vive en Afganistán un gran sentimiento de fracaso en cuanto a resultados. ¿Comparte esta visión?

R. Los resultados son complicados, pero hay signos positivos como la creación de un Ejército profesional. Aún necesita desarrollo y ahí es donde los socios de la OTAN juegan un papel importante en la formación de esos militares. Las mujeres han vivido un gran cambio respecto a la situación anterior. ¿Qué pasará cuando se vayan las tropas? Esperamos seguir comprometidos y que los europeos sigan comprometidos en la estabilidad.

P. ¿Cree que pueden recuperar la relación que tuvieron con Pakistán hasta las tensiones causadas por la captura de Bin Laden?

R. Ha sido un año duro pero el diálogo continúa. Es un momento difícil de la relación.

P. En los debates republicanos Europa ha sido señalada como mal ejemplo de lo que Obama quiere hacer en Estados Unidos. ¿Ha dejado de ser un modelo?

R. Son cosas de la campaña y no precisamente se entienden en otros públicos.

P. Pero la imagen de Europa es más débil debido a la crisis.

R. También la imagen de Estados Unidos se ha visto perjudicada por la crisis económica, es una de las razones por las que queremos una Europa fuerte y un euro fuerte, está en nuestro interés, no únicamente en el interés europeo.