_
_
_
_

Policia y Ejército brasileños ocupan ocho favelas de Río sin disparar un tiro

Los traficantes de drogas prefirieron esta vez huir antes que enfrentarse con las fuerzas del orden

Al amanecer y bajo un calor de verano, alrededor de 850 hombres, entre policías y militares, han llevado a cabo una brillanete e incruenta operación de ocupación de ocho favelas en Río de Janeiro, en el castizo varrio de Santa Teresa -que los portugueses habian construido imitando la Alfama de Lisboa- así como en el Complexo de São Carlos, en el centro de la ciudad.

La operación ha sido llevada a cabo por las fuerzas de la Policia Militar apoyadas por 17 blindados M113 de la Marina y cuatro anfibios modelo Clanf. Ha durado sólo noventa minutos. A su término, han sido lanzados desde lo alto de las favelas ocupadas cohetes que despedían humo azul para indicar que la operación habia sido realizada con éxito.

No fue necesario disparar un solo tiro porque los traficantes de droga, según informó Elisa Brabdão, presidenta de la comunidad de vecinos de una de las mayores favelas ocupadas habian preferido huir o esconderse para no tener que enfrentarse con las fuerzas del orden. Ahora, según ha confirmado el comandante de la Policia Militar Alan García, están siendo revisadas casa por casa para comprobar que las familias, por connivencia o por miedo, hayan podido ocultar a los llamados "bandidos', como ya ocurrió en la ocupación, meses atrás, del gran Complexo del Alemão.

Los "morros" ocupados esta mañana, como se les llama en Rio a las favelas, sobretodo las ubicadas en lo alto de montículos, han sido: Zinco, Querosene, Mineira, Coroa, Fallet, Fogheteiro, Escondidinho y Prazares, todos ellos considerados violentos y dominados hasta hoy por el poder paralelo de los narcos.

En las nuevas ocho favelas liberadas de traficantes van a ser instaladas otras tantas Unidades de Policia Pacificadora como las cerca de 20 ya existentes por las que los ciudadanos de la ciudad "de abajo", ahora pueden circular por ellas sin miedo a la violencia, al haber sido convertidas en barrios más de Rio, ocupadas permanentemente por las fuerzas del Estado, tras haber huido de ellas los traficantes.

El hecho de que esta vez, los narcos prefirieran huir antes de la llegada de las fuerzas del orden, demuestra, según los analistas, que están perdiendo fuerza en todo el territortio de la ciudad y que han entendido que esta vez el Estado "va a en serio". Los cariocas, que esperaban este momento desde hace 40 años, dan gracias no sólo al Cristo Redentor del Corcovado, sino tambien a las Olimpiadas del 2016, que Rio ganó y podría haber perdido de no haberse tomado en serio esta vez la liberación de la violencia de las favelas tras años de pesadillas por la connivencia de varios poderes: politico, judicial y policial con los traficantes a cambios de votos y de financiación de sus campañas electorales.

Policías toman posiciones en el asalto al complejo de Morro dos Prazeres, en Río de Janeiro
Policías toman posiciones en el asalto al complejo de Morro dos Prazeres, en Río de JaneiroAP

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_