La Casa Blanca vincula el coche bomba de Nueva York con terroristas extranjeros
El fiscal general afirma que hay "avances sustanciales" en la investigación y que se producirán detenciones
Pese a haber sido víctimas de los atentados del 11-S, los neoyorquinos ya no se dejan intimidar por las amenazas terroristas. Tras el revuelo que se organizó el sábado alrededor de Times Square, una de las plazas más concurridas de la ciudad, donde un supuesto coche bomba fue desactivado por la policía antes de que pudiera causar ninguna fatalidad -el pánico no se extendió a otros barrios, donde la vida prosiguió con normalidad-, la ciudad amanecía como un lunes cualquiera, aunque la presencia policial en estaciones de metro e intersecciones importantes fue reforzada por las autoridades.
De momento, ni Janet Napolitano, secretaria de Seguridad Nacional, ni el jefe de la policía neoyorquina, Raymond Kelly, se atreven a apuntar con el dedo a nadie, ni al terrorismo de origen musulmán ni al de extrema derecha. Pero según ha declarado el fiscal general del Estado, Eric H. Holder, hay "muy buenas pistas sobre el caso". El diario The Washington Post ha informado de que el ataque "parece haber sido coordinado por varias personas en un complot con vínculos internacionales", según fuentes de la Administración de Obama. Otros funcionarios de la Casa Blanca también calificaron por primera vez de "intento de atentado terrorista" el incidente en la neoyorquina plaza de Times Square.
El mayor avance en la investigación fue el interrogatorio al dueño del vehículo Nissan Pathfinder que desató las alarmas el sábado por la tarde después de que un vendedor ambulante alertara a la policía de que salía humo del coche (ver mapa). En su interior se descubrieron tres depósitos de propano, dos contenedores con unos 20 litros de gasolina, dos relojes y una caja de fuegos artificiales que de haber estallado podrían haber convertido el coche en una bola de fuego. "Hemos identificado al propietario y hemos hablado con él", declaró escueto Paul Browne, subjefe de la policía de Nueva York. Sin embargo, según se filtró a través de la cadena CNN y la ABC, el propietario dijo haberle vendido el coche hace tres semanas a un hombre "de aspecto árabe o latino de unos veinte o treinta años" a través de la web Craigslist por 1800 dólares. La transacción 'en negro' se llevó a cabo en un centro comercial en Connecticut, donde reside el dueño 'oficial' de un vehículo que en el momento del atentado frustrado lucía una matrícula robada de un taller mecánico en Bridgeport (Connecticut).
La otra vía de la investigación policial se centra en encontrar a un hombre blanco de unos 40 años grabado por una cámara de seguridad parado junto al coche sospechoso poco antes de que la policía acordonara la zona. El sospechoso aparece en la grabación con una pequeña maleta, quitándose una camiseta y mirando a su alrededor. No obstante, el alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, curándose en salud, ha reconocido en la cadena NBC que quizás este hombre no tenga nada que ver con el caso. "Por Times Square pasan millones de personas. Este hombre ha resultado estar en una posición en la que la cámara ha podido grabarle bien y puede que tenga algo que ver con el caso, pero hay muchas posibilidades de que no. Estamos siguiendo muchas pistas", ha afirmado.
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