Obama refuerza la relación de EE UU con Japón
El presidente de EE UU renueva alianzas con Tokio en proliferación nuclear, cambio climático y apoyo militar en Afganistán
El presidente de EE UU, Barack Obama, y el primer ministro japonés, Yukio Hatoyama, expresaron hoy su compromiso con una relación "renovada" entre sus dos países, que se adapte "al cambio de los tiempos".
Ambos mandatarios se reunieron por espacio de una hora y media para abordar asuntos como la guerra en Afganistán, los programas nucleares de Irán y Corea del Norte o el futuro de la base estadounidense de Futenma en la isla japonesa de Okinawa, que ha causado serias tensiones en los lazos entre los dos países. Aunque ambos Gobiernos son firmes aliados desde la posguerra, desde su llegada al poder el pasado septiembre Hatoyama ha indicado que quiere una relación menos "dependiente" de EE UU y se ha declarado partidario de hacer más hincapié en los lazos hacia Asia, donde China cobra un peso cada vez mayor.
A lo largo de su rueda de prensa, ambos se han esforzado en señalar que los dos países mantienen una relación de "iguales". Obama ha asegurado que la relación representa "el pilar de la seguridad" en el continente asiático.
Hatoyama, por su parte, ha reiterado que la alianza sigue siendo la base de la política exterior de su país. Pero "dados los tiempos cambiantes y el clima global, me gustaría profundizar la relación y crear una nueva alianza EE UU-Japón que sea constructiva y orientada al futuro", ha dicho.
El problema de la base militar
La base de Futenma, que han descrito como un ejemplo de la "renovación" de la alianza, ha ocupado buena parte del tiempo de ambos, que acordaron dejar el futuro de estas instalaciones en manos de una comisión de trabajo que decida "lo antes posible" el destino del sitio militar.
EE UU quiere seguir adelante con un acuerdo suscrito en 2006 para trasladar la base -actualmente situada en medio de una ciudad de 92.000 habitantes- a un área menos poblada de la isla, mientras que Hatoyama ha indicado su inclinación a que esa base abandone el territorio japonés. El primer ministro japonés ha indicado que la decisión definitiva sobre Futenma será "difícil", aunque a medida que pase el tiempo será aún más complicada de tomar.
Los dos líderes abordarán también asuntos como la guerra de Afganistán, después de que Japón ha anunciado que destinará hasta 5.000 millones de dólares durante los próximos cinco años a la reconstrucción pero retirará sus barcos cisterna, que abastecían a los buques hacia el país asiático en el mar Indico.
Corea del Norte
Ambos mandatarios han emitido también una declaración conjunta en la que instan a Corea del Norte a retomar las negociaciones a seis bandas sobre su programa nuclear y advierten de que ese programa nuclear representa una "grave amenaza" para la proliferación.
Japón, indica la declaración conjunta, organizará el próximo enero una conferencia asiática contra la no proliferación, previa a la cumbre prevista para la primavera de 2010 en Washington. Obama, que ha presentado una propuesta para lograr un mundo sin armas nucleares, ha asegurado en la rueda de prensa que sería "apropiado" para él visitar las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki.
Obama completará su visita a Tokio mañana, con un discurso sobre la implicación de EEUU en Tokio y un almuerzo con el emperador Akihito y la emperatriz Michiko, antes de emprender viaje a Singapur para participar en la cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia Pacífico (APEC), la segunda etapa de su gira por Extremo Oriente. El presidente estadounidense tiene previsto completar su gira con una visita de Estado a China y una parada en Seúl.
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