Dos militares colombianos mueren cautivos de las FARC
El sargento del Ejército colombiano Alexánder Cardona, secuestrado hace cuatro meses por la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en el suroeste del país, murió junto al suboficial también cautivo Jesús Alberto Sol, informaron ayer en Bogotá fuentes de la Cruz Roja.
El portavoz de la delegación en Colombia del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), Carlos Ríos, dijo que los rebeldes comunicaron al organismo el fallecimiento de ambos militares.
De la muerte de Sol, que también era sargento, informó este martes su esposa, Viviana Rocío Garay, a quien se lo había comunicado un delegado del CICR que no precisó las circunstancias en que se produjo, según dijo.
"Fuimos contactados por las FARC, que nos informaron de la muerte de estas personas, y nosotros transmitimos el mensaje a sus familiares en Cali", precisó Ríos.
El portavoz agregó que las circunstancias de la muerte de Cardona y Sol son detalles que el organismo humanitario "maneja de manera confidencial, y de eso no hacemos ningún pronunciamiento público".
El fallecimiento de Cardona fue confirmado ayer desde Cali por su madre, Ana Lucía Marín.
Silencio del Ejército
La madre de Cardona, sargento del Ejército destacado en el suroeste del país, como Sol, dijo a la prensa que un delegado del CICR en Cali llamó el lunes a los familiares del suboficial para solicitarles que fueran a la oficina local del organismo. Agregó que el delegado les informó de que Cardona había muerto en cautividad e indicó que la familia nunca recibió del Ejército ningún tipo de comunicación sobre el caso del secuestro.
Cardona y Sol fueron secuestrados el 25 de marzo pasado por combatientes de las FARC en la zona rural de Tuluá, localidad a unos 400 kilómetros de Bogotá, en el departamento del Valle del Cauca.
La madre de Cardona precisó que su hijo y Sol salieron ese mismo día de Cali con el capitán Felipe Zúñiga, los tres vestidos de paisano. Al día siguiente, el capitán se presentó en el domicilio de Cardona para preguntar si él y Sol habían regresado, agregó.
La muerte de estos militares se suma a la de los 11 diputados del Valle del Cauca que perdieron la vida mientras estaban en cautiverio de las FARC en algún lugar del suroeste del país.
Los legisladores regionales murieron el pasado 18 de junio, según la organización insurgente, que en un comunicado divulgado el día 28 del mismo mes atribuyó el desenlace a un "fuego cruzado" con un grupo militar no identificado.
El Gobierno de Colombia rechazó esa versión y acusó a las FARC de asesinar a los diputados, que habían sido secuestrados en abril de 2002 en Cali y cuyos cadáveres no han sido entregados.
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