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Bush promete en su visita a Colombia reforzar los vínculos comerciales

Durante su estancia de siete horas el presidente de EE UU se ha reunido con Uribe, uno de los grandes aliados en América Latina

En la imagen, un joven junto a un hombre vestido como un preso de Guantánamo, se enfrenta a los antidisturbios en Bogotá.
En la imagen, un joven junto a un hombre vestido como un preso de Guantánamo, se enfrenta a los antidisturbios en Bogotá.AP

El presidente de EE UU, George W. Bush, ha asegurado durante su visita a Bogotá que trabajará "intensamente" para lograr la aprobación en el Congreso del tratado de libre comercio entre ambos países (TLC) y la continuación del apoyo al Plan Colombia contra el narcotráfico.

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Bush, que llega al país en medio del escándalo sobre los vínculos entre parlamentarios afines a Uribe y paramilitares, ha expresado su apoyo a su principal aliado en América del Sur, "al que estoy orgulloso de llamar amigo y aliado estratégico". Acerca del escándalo, Bush ha asegurado que "este país ha vivido momentos muy duros, y la mejor manera de sanar esas heridas es garantizar una justicia justa y rápida". Por su parte, el mandatario colombiano ha asegurado que la lucha contra el terrorismo se desarrolla bajo el manto de la "justicia", la "verdad" y las "reparaciones".

El escándalo no parece haber dañado la popularidad del presidente colombiano, que según las últimas encuestas goza de una aprobación a su gestión del 72%. Uribe ha agradecido a Bush su "apoyo entusiasta" al Plan Colombia, la iniciativa antidrogas y contra el terrorismo emprendida en el 2000.

Colombia es el principal receptor de ayuda estadounidense, principalmente militar, en América Latina. Desde ese año, Estados Unidos ha aportado más de 3.500 millones de dólares al Plan Colombia, la mayor parte de ellos a su aspecto militar, mientras que la ayuda que ha dado para proyectos sociales suma 717 millones de dólares. Desde su mayoría en el Congreso de EE UU tras las elecciones de noviembre pasado, los demócratas se han mostrado críticos contra el reparto de esas asignaciones.

Tras siete horas en la capital, el presidente de los Estados Unidos, George W. Bush, terminó su visita oficial a Colombia y partió hacia Guatemala, la cuarta etapa de su gira por América Latina que concluirá el martes en México. El mandatario, a bordo del avión Air Force One, partió a las 24.40, hora de España, de una base aérea militar aledaña al aeropuerto internacional.

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Comunicado de las FARC

Raúl Reyes, miembro de la cúpula de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), ha emitido un comunicado en el que sostiene que Bush "viene a pedirle cuentas a Uribe de las millonarias inversiones de dólares en los planes para acabar con las FARC amparado en la falacia de combatir el terrorismo y el narcotráfico".

"Aquí en Colombia, el pueblo con su ejército revolucionario resiste victorioso", ha añadido el dirigente guerrillero. Reyes ha asegurado que Uribe actúa "sumiso" ante el mandatario estadounidense, al que ha descalificado por "sus indignas políticas de desigualdades sociales, represión y saqueo".

Disturbios tras la llegada de Bush

Un mitin de protesta por la visita a Bogotá del presidente de Estados Unidos, George W. Bush, ha degenerado en desórdenes protagonizados por al menos dos centenares de jóvenes que han destrozado comercios, bancos y paradas de autobuses en el centro de la ciudad.

Los manifestantes también han prendido varias barricadas en algunos tramos de la céntrica Carrera Séptima, parte de la cual fue cerrada al tránsito para asegurar el paso de la caravana de Bush, que ha llegado al mediodía de hoy a la capital colombiana. Los desórdenes han estallado tras ser Bush recibido por el presidente colombiano, Álvaro Uribe, en la Plaza de Armas de la Casa de Nariño, la sede del Ejecutivo. Bush ha recibido allí los honores militares previos a la reunión bilateral de menos de una hora que centrará esta visita del presidente norteamericano a Bogotá.

Los manifestantes han sido disueltos por escuadrones antidisturbios de la Policía Metropolitana de Bogotá, que ha hecho uso de vehículos con chorros de agua y gases lacrimógenos. Más de 20 banderas de Estados Unidos han sido incendiadas en este mitin, que ha tenido como escenario la plazoleta de La Macarena, en el centro norte de Bogotá. La protesta había sido convocada por la Gran Coalición Democrática (GCD), convergencia de centrales obreras, partidos políticos de oposición y movimientos de estudiantes y campesinos.

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