_
_
_
_
Reportaje:

Lula y los pobres

El presidente de Brasil y candidato a la reelección apela al voto de los humildes para los comicios del 1 de octubre

Cuando faltan menos de 20 días para las elecciones en Brasil, que se celebrarán el 1 de octubre, los sondeos siguen dando como ganador en la primera vuelta al actual presidente, Luiz Inácio Lula da Silva. Por esa razón, el candidato del Partido de los Trabajadores (PT) se niega a asistir a los debates, mientras la oposición se esfuerza en arrastrarle como sea a una segunda vuelta que consideran supondría una nueva elección.

El propio Lula ha pronosticado que ganará las elecciones y se apoya cada vez más en los pobres, que nunca le habían votado antes y que ahora forman su electorado preferido.

En un apasionado discurso electoral, afirmó el domingo que los pobres "son cada célula de su cuerpo y cada gota de su sangre". Y explicó dirigiéndose a un público compuesto por gente humilde: "Hubo un tiempo en que yo perdía las elecciones porque el pueblo pobre no me votaba. La rabia nacía en mí". Según Lula, los pobres no le votaron en las tres elecciones anteriores a la de 2002 "porque consideraban que un pobre no estaba en condiciones de gobernar el país". Y añadió: "¿Cuál es ahora mi orgullo? Es vuestra convicción de hoy de que cualquiera de vosotros está preparado para gobernar".

Lula dice no pertenecer a las élites de este país que en 2002 decidieron votarle. "Yo no soy un producto de las élites políticas, soy producto de las huelgas obreras de 1978, de la connivencia con los sin techo, de la lucha para la reforma agraria, de la lucha de personas que tuvieron sus casas inundadas. Yo he sentido en mi piel y en mi carne lo que le pasa al pueblo pobre de este país". Para ilustrarlo, contó que también él tuvo tres veces su casa inundada por las lluvias. Al referirse a la política exterior desarrollada durante su Gobierno, Lula proclamó: "Brasil le dijo al mundo: 'yo soy pobre, pero he aprendido una cosa, a andar con la cabeza erguida".

En Santa María de Río Grande do Sul, en el sur del país, patria del dictador populista Getulio Vargas, que en su tiempo fue considerado el "padre de los pobres" y que acabó suicidándose, Lula quiso recordar la carta-testamento de Vargas, en la que decía que ofrecía al pueblo hasta la última gota de su sangre. Y se preguntó: "¿Cómo conseguí sobrevivir a las calumnias e infamias?". La respuesta fue una cita de Vargas, que escribió antes de suicidarse: "El odio, las infamias, la calumnia no abatieron mi ánimo". Y concluyó: "Estas calumnias fueron las que llevaron a Vargas a quitarse la vida, las que no quisieron dejar gobernar a Juscelino Kubitschek y las que obligaron a João Goulart a abandonar el Gobierno". Para Lula, ahora el "pueblo oprimido es el artista principal del país". Con todo, es previsible que, junto a ese pueblo humilde, sean las élites financieras y de la banca, a las que ha prometido no cambiar su política macroeconomica en un posible segundo mandato, las que voten por Lula. Durante su mandato, la banca y la Bolsa cosecharon ganancias sin precedentes.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_