Cuatro observadores de la ONU y tres soldados rusos, secuestrados en Abjasia

Al menos cuatro observadores militares de la ONU y tres soldados de las Fuerzas de Interposición de la Comunidad de Estados Independientes (CEI), integradas en su mayoría por militares rusos, han sido secuestrados esta mañana en el desfiladero de Kodori, una zona desmilitarizada entre la región separatista de Abjazia y el resto del territorio de Georgia, según ha informado Viacheslav Eshba, ministro de Defensa del autoproclamado Gobierno de Abjasia. La nacionalidad de los observadores no ha sido precisada.

Por el momento, el número de observadores secuestrados no está claro, ya que otras fuentes hablan de entre tres y seis. Así, el mando de las Fuerzas de Interposición de la CEI ha asegurado que los secuestrados son seis observadores de la Misión de Observación de las Naciones Unidas en Georgia (MONUG o UNOMIG), encargada de supervisar el alto el fuego entre Georgia y esta provincia separatista. Esta cifra coincide con la ofrecida por la agencia de noticias rusa Interfax, que cita fuentes del gobierno local. En un principio, France Presse hablaba de ocho, para luego revisar el balance y situarlo en tres.

Por su parte, Eshba ha explicado que el suceso ha ocurrido a las 5.30 GMT (una hora más en la España peninsular) en la aldea de Gvandra, en la zona de Kodori, al oeste de Georgia, cuando el automóvil en el que viajaban los observadores de la ONU y militares de las tropas de paz ha sido tiroteado y detenido por unos desconocidos. Emzar Kvitsiani, representante del presidente de Georgia, Eduard Shevardnadze, en el desfiladero de Kodori (que separa a Abjasia del resto de Georgia), ha admitido que los sucesos pueden tener vinculación con la firma de un convenio con la parte abjasia, prevista para hoy.

Tercer secuestro de observadores

Este convenio contempla el retorno de refugiados a las aldeas situadas en la zona sur del desfiladero de Kodori. "Todo indica que hay fuerzas que no quieren que en la zona del conflicto se mantenga la paz", ha manifestado Kvitsiani. Una parte del desfiladero de Kodori, por el que pasa la frontera entre Georgia y la separatista Abjasia, está en manos del Gobierno abjasio y la otra está controlada por Georgia. Los observadores de la ONU emplazados en la zona del conflicto efectúan una vez al mes misiones de control de la situación en esa región, donde hay fuerzas de paz de la CEI.

La situación conflictiva en esa región es producto de la guerra separatista que en 1992-1994 permitió a Abjasia escindirse de facto de Georgia. La misión de la ONU en este país fue creada en agosto de 1993 para comprobar el cumplimiento del acuerdo de alto el fuego entre el Gobierno de Georgia y las autoridades de la provincia de Abjazia que puso fin al conflicto armado. Su mandato se extendió tras la firma de las partes del Acuerdo para el Alto el Fuego y la Separación de Fuerzas el 14 de mayo de 1994. La misión cuenta con 116 militares, 96 civiles internacionales y 176 civiles locales de un total de 23 países, esencialmente europeos, como Francia, Alemania o Reino Unido, así como de Estados Unidos.

Todas las partes implicadas en el conflicto abjasio coinciden en que el retorno paulatino de los refugiados, tanto georgianos como de otras etnias y confesiones (armenios, griegos o judíos), debe servir de primer gran paso para la solución del litigio. El secuestro de hoy es el tercero en los tres últimos años; en los dos casos anteriores, los observadores de la ONU capturados fueron liberados tras una negociación con sus captores.