Putin pide a Shevardnadze que le entregue a un grupo de guerrilleros chechenos refugiados en Georgia

El presidente ruso, Vladímir Putin, declaró ayer que espera que Georgia entregue rápidamente a los guerrilleros detenidos al cruzar la frontera, mientras que el líder georgiano, Edvard Shevardnadze, aseguró por su parte estar dispuesto a dar luz verde a la extradición de los chechenos si resulta que éstos son 'criminales o terroristas'. Un primer grupo de separatistas fue detenido el sábado, y un segundo, ayer, cuando entraron desde Chechenia en territorio georgiano. Las relaciones ruso-georgianas se han deteriorado en los últimos días debido a las acusaciones y amenazas de Moscú, que considera que Tbilisi no hace nada por acabar con los guerrilleros chechenos y los mercenarios que se esconden en el desfiladero del Pankisi.

Serguéi Mirónov, el presidente del Senado ruso, comentó el fin de semana pasado que Moscú debería seguir el ejemplo de Israel, 'país que no espera a que la desgracia llegue a su casa y lanza ataques preventivos cuando conoce el paradero exacto de los terroristas'. Y el ministro de Exteriores, Ígor Ivanov, afirmó que 'los mercenarios extranjeros se encuentran como en su casa en el Pankisi'.

Las palabras de Mirónov desencadenaron una tormenta en Georgia: el portavoz de la presidencia opinó que sólo podían ser interpretadas como 'llamamiento a la guerra' y anunció que Tbilisi buscaría aliados internacionales. Además, los georgianos han acusado a los rusos de bombardear territorio georgiano en la frontera con Chechenia, cargos que el Kremlin rechaza.

Las detenciones de los guerrilleros chechenos en Georgia y la disposición de las autoridades de ese país a entregarlos son interpretadas como una señal de que Tbilisi no desea que las relaciones con Moscú empeoren aún más. Otro buen signo es la llegada ayer a la capital georgiana de una delegación del Servicio Federal de Seguridad de Rusia, encabezada por su vicedirector Alexandr Zhdankov, responsable de la lucha contra el terrorismo.

'Juzgaré sobre cuán serias son las intenciones de las autoridades georgianas de luchar contra el terrorismo por la rapidez con que los bandidos que trataron de entrar en Rusia y fueron empujados de vuelta se verán en la cárcel de Lefórtovo, en manos de la justicia rusa', declaró ayer Putin durante una reunión con los principales miembros del Gobierno. El líder ruso agregó que considera que la detención de 'parte de los bandidos representa el primer indicio de que los dirigentes georgianos piensan en la necesidad de combatir el terrorismo internacional'.

En cualquier caso, está claro que las relaciones ruso-georgianas no mejorarán sustancialmente mientras el Pankisi siga sirviendo de refugio a los guerrilleros chechenos. El problema es que Shevardnadze no desea lanzar una operación militar en el desfiladero, a pesar de las presiones de Moscú. Y ello porque opina, con razón, que semejante operación golpeará principalmente a los refugiados chechenos y a la población local del Pankisi. Al mismo tiempo, el líder georgiano prometió 'neutralizar' a los guerrilleros en el plazo de mes y medio.