Netanyahu acepta el Ministerio de Exteriores si Sharon convoca elecciones anticipadas
Sharon negocia un nuevo Gabinete pese a las presiones del Likud para convocar elecciones
El ex primer ministro israelí Benjamin Netanyahu ha aceptado el cargo de ministro de Exteriores del Gabinete de Ariel Sharon, quien hoy ha comenzado la ronda de negociaciones con distintas facciones políticas para intentar salvar a un Gobierno en crisis tras la renuncia de todos los ministros laboristas del Gobierno de Unidad Nacional. Sin embargo, el ex líder del Likud pone como condición para aceptar la cartera la celebración de elecciones anticipadas.
En un comunicado, Netanyahu dice que aceptará la cartera dejada por Simón Peres "en un Gobierno que lleve a las elecciones anticipadas". Se plasman así las presiones a las que se enfrentaba el primer ministro desde la renuncia de los ministros laboristas, no sólo exteriores, sino también de su propio partido, inclinado a celebrar nuevos comicios ante el deterioro de imagen que produciría un gobierno de coalición con los pequeños partidos derechistas más radicales.
Pero no se quedan ahí las exigencias de Netanyahu. En una entrevista con la televisión pública israelí, ha explicado que también ha pedido la expulsión de Yasir Arafat de los territorios palestinos y el rechazo del Gobierno a la creación de un estado palestino.
Sin embargo, aún no se conoce la respuesta del primer ministro a la petición de Netanyahu, su principal rival en unas eventuales primarias del partido Likud.
Ganar tiempo
El diario independiente israelí Haaretz, ya da por hecho que Sharon convocará elecciones anticipadas en cuestión de semanas pero, por el momento, con estas negociaciones, quiere ganar tiempo y evitar que la moción de censura contra su Gobierno, prevista para mañana en el Parlamento, no tenga éxito.
El primer ministro se reúne hoy con los miembros del partido Unión Nacional-Israel Beitenu, pero es poco probable que se unan al Gobierno, a menos que Sharon endurezca su postura con respecto a los palestinos. Más tarde, el dirigente conversará con los delegados de partidos minoritarios.
Pese a sus movimientos, Sharon intenta convencer a Estados Unidos de que, aun con una nueva coalición derechista, las directrices políticas serán las mismas que hasta el momento, pero Washington teme que radicalice su postura con los palestinos. Algo que despierta especial temor es el posible nombramiento del general Mofaz como ministro de Defensa. Sharon ha confirmado hoy que ofrecerá el puesto definitivamente al ex jefe del Estado Mayor, el hombre que dirigió la mayor ofensiva militar contra los palestinos y que se muestra abiertamente partidario de deportar al líder palestino, Yasir Arafat.
