El huracán Lili pierde intensidad en EE UU y se transforma en tormenta tropical

El huracán Lili, que llegó a tener la categoría cuatro, ha perdido esta madrugada intensidad al llegar a las costas del estado de Luisiana (EE UU) procedente del Golfo de México, y ha sido degradado a tormenta tropical.

El presidente de EEUU, George W. Bush, ha declarado hoy "zona de desastre" todo el territorio del estado de Luisiana para paliar los efectos del paso del Lili, que también ha afectado a los estados de Misisipí y Texas. Los vientos máximos sostenidos han disminuido de 150 a 80 kilómetros por hora, pero Lili aún representa una amenaza por las fuertes lluvias que arroja sobre Luisiana y Misisipi, que podrían ocasionar peligrosas inundaciones. El Centro Nacional de Huracanes (CNH), con sede en Miami, ha advertido que la tormenta también podría generar tornados aislados en el este de Luisiana y en Misisipi en la noche del jueves.

Lili estaba localizado, a las diez de la noche de ayer (hora peninsular española) cerca de los 31,3 grados de latitud norte y los 92,2 grados de longitud oeste, muy cerca de Alexandria, en Luisiana. Se suspendieron todos los avisos de huracán y de tormenta tropical emitidos por las autoridades desde el este de High Island (Texas) hasta la desembocadura del río Misisipí, así como desde esta zona hasta la frontera de Alabama y Florida, incluyendo Nueva Orleans y el lago Pontchartrain.

Medio millón de evacuados

Casi medio millón de residentes de la zona entre Texas y Luisiana tuvieron que abandonar sus casas hacia lugares más seguros. El huracán desarrolló su mayor fuerza destructiva a principios de esta semana a su paso por el Caribe, especialmente en Cuba, donde dejó ocho muertos a su paso y miles de personas evacuadas.

La tormenta tocó suelo estadounidense ayer, mientras seguía avanzando a una media de 25 kilómetros por hora en dirección noroeste. Luisiana se ha preparado para el huracán más fuerte desde los años 40, pero "parece que finalmente hemos tenido suerte", ha dicho el gobernador de Luisiana, Mike Foster, quien ha recordado que el Isidore ya dejó pérdidas por valor de más de 100 millones de dólares.

En Texas, el gobernador Rick Perry ha firmado una declaración de zona de desastre y la misión de control de vuelo de la NASA suspendió todas sus actividades, lo que retrasará al menos una semana el lanzamiento del transbordador Atlantis desde Cabo Cañaveral (Florida), prevista para el próximo miércoles.

Lili ha sido el cuarto huracán de la temporada del Atlántico y el único que ha alcanzado categoría cuatro en la escala de intensidad Saffir-Simpson, que va del uno al cinco. Hasta el momento se han formado doce tormentas tropicales, dos más de las pronosticadas por los expertos, y cuatro huracanes, incluyendo a Lili, en la temporada de huracanes del Atlántico, que comenzó el 1 de junio y termina el 30 de noviembre.