Londres responsabiliza a los talibán de la suerte de la periodista británica
El Reino Unido asegura que no tiene confirmación sobre su puesta en libertad y se teme por su seguridad una vez iniciados los ataques
La preocupación por la suerte que pueda correr la periodista del tabloide Sunday Express se ha agravado desde el comienzo de los ataques de las fuerzas estadounidenses y británicas contra objetivos en Afganistán. A pesar de que su puesta en libertad parecía inminente en las horas previas al inicio de los bombardos, el Reino Unido asegura que no se tienen noticias de la reportera y hacen responsable de su seguridad al régimen talibán.
Un ministro talibán había anunciado esta mañana la liberación de la periodista británica Yvonne Ridley, que ha permanecido varios días en poder de los estudiantes de teología, según anuncia la cadena de televisión británica BBC. Sin embargo, en el Reino Unido no se da excesiva credibilidad a esta información y se mantiene el compás de espera.
El Gobierno del Reino Unido tendrá al régimen talibán como responsable de lo que le pueda pasar a la periodista británica Yvonne Ridley, detenida en Afganistán desde hace diez días.
"Por el momento no tenemos noticias sobre su posible puesta en libertad, pero seguimos haciendo comprobaciones", ha dicho un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores.
Temor en Gran Bretaña
"Estamos muy preocupados. Tenemos mucho miedo. Tememos por su suerte. No sabemos exactamente dónde está. Hay que esperar lo que pase mañana", decía Allan Ridley, padre de la informadora.
Por otra parte, informaciones procedentes de Islamabad indicaban este domingo que sería trasladada mañana a la frontera con Pakistán para entregarla a los representantes de la embajada británica en ese país.
La periodista fue detenida el pasado 28 de septiembre por entrar ilegalmente en ese país, sin pasaporte y acompañada por dos guías cerca de la ciudad de Jalalabad, en el sureste de Afganistán y a 14 kilómetros de la frontera con Pakistán.
