Israel bombardea instalaciones militares palestinas en respuesta al disparo de morteros
Una persona ha muerto y al menos 17 han resultado heridas en el ataque
Los bombardeos se han producido contra el cuartel general de la Marina palestina y un edificio que alberga los servicios secretos militares en la franja de Gaza, según ha informado un responsable palestino.
La víctima mortal es el teniente médico de las fuerzas marítimas Wael Khweitar, de 27 años.
El bombardeo más intenso fue el registrado contra la base de la Marina, en el distrito de Sudanía, en el norte, donde murió el oficial y otras siete personas resultaron heridas.
El edificio de la inteligencia militar alcanzado por los misiles israelíes está situado en la localidad de Deir el Balah, al sur de la franja, donde se registraron los otros diez heridos.
El bombardeo fue una represalia por el disparo de cuatro morteros por milicianos palestinos ocurrido esta mañana contra asentamientos judíos, que no produjeron heridos.
En las últimas semanas, los palestinos disparan con morteros casi diariamente en la franja de Gaza, algunos de los cuales han caído al otro lado de la frontera, en territorio israelí.
El primer ministro israelí, Ariel Sharon, cuyo gobierno ha sido condenado por la comunidad internacional por sus planes de ampliar las colonias judías en los territorios ocupados, aseguró tras el bombardeo que "sabemos perfectamente lo que hacemos, y la seguridad volverá".
En el momento de la operación, Sharon se encontraba a pocos kilómetros de la franja de Gaza, en el cercano kibutz Nahal Oz, situado junto a la frontera con el territorio palestino, que en las últimas semanas ha sufrido el disparo de morteros palestinos lanzados desde el otro lado de la frontera aunque no causaron víctimas.
"Sabemos perfectamente lo que hacemos. Tengo un plan de acción muy claro que va a ser llevado a cabo, y la seguridad (para los israelíes) volverá", ha afirmado Sharon.
"Objetivos legítimos"
Los asentamientos judíos en Gaza y Cisjordania, donde viven unos 200.000 colonos, son considerados "objetivos legítimos" de la lucha contra la ocupación israelí en la actual "intifada", que se prolonga ya seis meses y medio y ha causado más de medio millar de víctimas, la mayoría palestinas.
Los planes anunciados por el Gobierno del halcón Sharon de ampliar varios asentamientos en Cisjordania han provocado fuertes críticas internacionales, incluso de Washington, principal aliado de Israel, que ha calificado el proyecto de "provocativo".
El ministro de la Vivienda, Natán Sharanski, aprobó la semana pasada la construcción de 700 nuevas viviendas en dos asentamientos cercanos a Jerusalén, Maalé Adumin y Alfei Menasheh.
El Ministerio proyecta poner a la venta terrenos para la construcción de un total de 5.000 casas más en Cisjordania en este año 2001.
El ministro de Exteriores, el laborista Simón Peres, defendió ayer la postura oficial del gobierno de Sharon de que no se construirán nuevos asentamientos y únicamente se ampliarán algunos para cubrir el crecimiento demográfico natural.
