_
_
_
_
El ojo de la mantis marina (‘Odontodactylus scyllarus’) es simplemente extraordinario. Cada uno está compuesto a su vez de 10.000 omatidios. La banda que lo atraviesa constituye un excelente analizador del color. Los dos ojos se combinan para formar una visión telescópica y trinocular, y localizan a la presa teniendo en cuenta la profundidad de campo y la distancia. Las mantis perciben el ultravioleta e incluso la luz polarizada gracias a 16 tipos de células fotosensibles. Muy agresivos pese a su pequeño tamaño, atacan a sus presas con muchísima rapidez.
REPORTAJE

Mirada animal

Con visión telescópica o nocturna. Con membranas que facilitan el camuflaje entre la vegetación o con un alcance de 180 grados Millones de años de evolución han permitido a las especies desarrollar ojos en una fascinante variedad de aspectos, texturas y capacidades

_

newsletter

Recibe la mejor información en tu bandeja de entrada
Apúntate
_