El rey Harald de Noruega, de baja por una infección respiratoria

Nuevo contratiempo en la salud del rey Harald de Noruega. Según ha informado este miércoles 31 de enero la casa real en un escueto comunicado —que tan solo ha publicado en noruego en la web oficial de la familia real—, el soberano está de baja por una infección en las vías respiratorias, por la que ha tenido que suspender su agenda por unos días. Harald V, de 86 años, se mantendrá apartado de los actos oficiales que tenía previstos hasta el próximo 2 de febrero y será su hijo, el príncipe heredero Haakon, quien en los próximos días actuará como regente y se hará cargo de las actividades de su padre.

Harald de Noruega, el único reinante en Europa que lleva en el trono desde el siglo XX después de que este mes de enero abdicara Margarita de Dinamarca, tenía previsto este mismo miércoles un almuerzo oficial en el que ha sido sustituido por su hijo. Esta tarde, Haakon de Noruega y su madre, la reina Sonia, serán los encargados de ofrecer una recepción en el Palacio Real con motivo de la inauguración del 750º aniversario de la Ley de Tierras de Magnus Lagabøte. El próximo viernes, su hijo también le va a tener que sustituir en varias audiencias que el monarca debía atender, entre ellas con el embajador de Estados Unidos o el ministro de exteriores.

En los últimos meses, el rey, que el próximo 21 de febrero cumplirá los 87 años, ha sido hospitalizado en varias ocasiones. El pasado mes de mayo fue ingresado por una infección; una nueva hospitalización que se sumaba a otras dos sufridas por el monarca en menos de un año. En esas ocasiones, al igual que ahora, le sustituyó en sus deberes reales su hijo. En octubre de 2020, el rey se sometió a una intervención cardíaca para reemplazar una válvula colocada en 2005 en una operación a corazón abierto. El covid también le llevó al hospital en marzo de 2022, y otra de las veces fue por una operación de rodilla.

A pesar de los achaques de salud, sus problemas de movilidad y de su edad, en ningún caso Harald de Noruega ha pensado en una posible abdicación, al menos así lo manifiesta en público. En el trono desde enero de 1991 tras la muerte de su padre, el rey Olav V, a los 87 años, recientemente él mismo se encargó de zanjar cualquier especulación sobre una posible salida del trono. El pasado 23 de enero, preguntado por los periodistas durante un acto en la organización mediática Faktisk, en Oslo, sobre si había pensado en algún momento abdicar tal y como acababa de hacer la reina Margarita, contestó: “Mantengo lo que he dicho todo el tiempo. He prestado juramento al Storting [el Parlamento noruego] y es de por vida”, dijo el rey Harald, refiriéndose a la promesa que hizo al Parlamento cuando accedió al trono a los 53 años. En 2019, el príncipe heredero Haakon, que el pasado mes de julio cumplió los 50 años, habló de lo que suponía sustituir a su padre en momentos puntuales: “Hasta ahora, creo que hemos gestionado el trabajo bastante bien juntos. Lo contemplo como si fuéramos un equipo. Distribuimos el trabajo para lograr el mejor resultado posible. Creo que seguiremos haciéndolo así en los años venideros”, dijo quien que cada vez tiene una agenda oficial más apretada.

El próximo acto que aparece en la agenda oficial del rey, que ya acumula 33 años en el trono nórdico, está previsto para el próximo 4 de febrero, cuando tiene que asistir al campeonato nacional de rifle en Stjørdal.