Jesús Calleja, el aventurero confinado en casa

“¿Qué voy a hacer yo en casa? Yo que no me quedo en casa nunca. Todo el día viajando. Nueve meses y cuando llego a casa estoy todo el día por ahí en el monte. ¡Ay Dios mío!″, se preguntaba Jesús Calleja al principio del periodo de confinamiento. El alpinista y explorador, que cumple este sábado 55 años, es una persona inquieta y muy activa, como demuestra en sus programas de televisión. Y por eso desde el mes pasado no ha parado de hacer cosas: mucho deporte, mensajes positivos en las redes sociales y juegos con los perros. E incluso cocinar, aunque no esté muy habituado a ello.

Estos días está mostrando más que nunca su casa situada en Golpejar de la Sobarriba, un pueblo de la provincia de León. Autóctono de Fresno de la Vega, al presentador le gusta la vida en el campo y prefiere recorrer 700 kilómetros para trabajar en Madrid —cuando no se encuentra España en estado de alarma— en lugar de residir en la capital. “Como humanos necesitamos un tiempo de tranquilidad, de lectura, de contacto con la naturaleza. Si nos convertimos en máquinas de producir y pasamos la vida estresados, algo estamos haciendo mal”, contaba a EL PAÍS el año pasado. Lo primero que está haciendo durante la cuarentena es construir un huerto en su extenso jardín. Empezó con el pico y la pala, pero finalmente se ha decantado por instrumentos más modernos para avanzar más rápido.

Todas estas actividades las retransmite en sus redes sociales, donde entretiene a sus seguidores y les envía mensajes de ánimo. “Estamos absolutamente alucinados con vuestro trabajo. Estáis ahí arrimando el hombro de una manera tan extraordinaria. [...] Estamos toda la sociedad perplejos con vuestro trabajo y sabíamos que erais importantes, pero ahora sí que nos estamos dando cuenta de lo que sois en la sociedad", dijo Calleja en un vídeo en agradecimiento a la labor del personal sanitario. Por supuesto, siempre con una sonrisa. Una ilusión y una energía que agradecen sus seguidores: “Gracias Jesús por tus consejos, me has motivado”, “Te adoro. En cuarentena me has sacado muchas risas”, “Eres un grande entre los grandes. Eres una fuente de inspiración” y “Cómo me gusta lo positivo que eres. Da gusto verte y escucharte”, son algunos de los mensajes que ha recibido. En Twitter tiene casi 700.000 seguidores; en Instagram, más de 800.000; y en Facebook supera el millón.

También le escriben los invitados de sus programas. Uno de los últimos en Planeta Calleja fue Sergio Boixo, jefe científico de teoría de la computación cuántica de Google, con el que recorrió las instalaciones de la compañía en Los Ángeles (California, EE UU). “Macho eres una fuerza de la naturaleza. Qué energía”, ha comentado el informático en el perfil del presentador. Calleja también ha dedicado una publicación al actor Dani Rovira, que recientemente ha revelado que padece linfoma de Hodgkin, un tipo de cáncer: “En cuatro días volvemos a hacer payasadas y vivir a full la vida como siempre nos ha gustado. Se te quiere mucho, amigo”.

Sus aventuras televisivas las ha compartido con celebridades como Miguel Ángel Muñoz, Eugenia Martínez de Irujo, Eva Hache, Jorge Javier Vázquez, Santiago Segura... Y con muchos de ellos mantiene muy buena relación: “Estos personajes acaban derrochando emociones y se convierten en amigos míos”. Hace tres años celebró su cumpleaños con Blanca Suárez, Álex González, Carles Francino, Mercedes Milá, David Bisbal y la esposa del cantante, Rosanna Zanetti. “El martes es mi cumpleaños pero lo he celebrado antes con mis amigos de toda la vida y los nuevos amigos que voy haciendo, y lo mejor es poder juntarlos a todos en mi tierra (León) y celébrarlo por todo lo alto, como sabemos hacer en los pueblos”, escribió entonces el explorador.

Con sus programas ha logrado mostrar el lado más personal de los famosos y sonsacar íntimas confesiones. Mercedes Milá reveló que fue amenzada por la banda terrorista ETA y que sufrió una depresión durante las dos últimas ediciones que presentó de Gran Hermano: “Yo lo he visto tan negro que hubo un momento que pensé que prefería morirme a seguir así”. De Lara Álvarez obtuvo su deseo de tener hijos: “Quiero ser madre sin duda. Me falta encontrar una persona que pase lo que pase en la relación pueda ser un buen padre y eso aún no lo he encontrado”. Y de India Martínez, sus orígenes humildes y su infancia rebelde: "He partido narices, he tirado piedras…”.

También muy reveladoras fueron las confesiones de Ana Botín, presidenta del Banco Santander, en un programa que supuso un éxito de audiencia: tuvo una cuota de pantalla del 19,3%, es decir, 2,7 millones de telespectadores siguieron la emisión y 7,8 millones la vieron en algún momento. “Mi padre me llamó un día, tras estar 10 años en Latinoamérica, y me invitó a irme para que pudiese haber fusión. Hizo lo que tenía que hacer, pero la manera en que me lo dijo me hizo daño”, comentó Botín sobre su expulsión de la entidad bancaria en 1999 tras protagonizar una portada de El País Semanal que ejecutivos de Central Hispano, empresa con la que se iban a fusionar, interpretaron como un aviso de su lanzamiento como futura jefa.

Calleja se quita mérito como entrevistador porque considera que estas personas se animan a desvelar detalles muy íntimos por el concepto del programa en sí. “Lo increíble es lo que se puede ver de un personaje cuando le sacas de su entorno, de su zona de confort. Tienes a alguien diez días contigo, desayunando, comiendo, viviendo una experiencia con momentos duros, y claro, dejan de ser personajes y pasan a ser personas y a comportarse como son en realidad. Más allá de la aventura, lo que yo persigo es desnudarles y que me muestren su verdad”.

Ahora celebra su cumpleaños en plena cuarentena, con la promesa de seguir animando a sus seguidores con más vídeos y más directos con sus populares amigos; hasta el momento ha conversado con Mercedes Milá y Álex González. Pero sobre todo mantendrá su agenda ocupada para no pensar en el coronavirus: trabajando en sus próximos programas, leyendo, haciendo deporte, terminando su huerto... “Porque siempre hay que tener una actitud de positivismo”.